El presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Senadores, Fabián Ríos, destacó la decisión presidencia de eliminar la jubilación privada, considerando dicha acción como “la culminación de uno de los últimos vestigios de la década liberal en la argentina”.

El senador correntino Fabián Ríos se refirió a la decisión presidencial de eliminar el sistema previsional de capitalización anunciado durante un acto realizado ayer en la sede de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses). “Es una decisión que apunta a que en el corto y mediano plazo no haya jubilados que cobren haberes por debajo de la línea de pobreza e indigencia”, aseguró.

El titular de la comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara Alta explicó que “en esta época de crisis, con bancos que quiebran, el mercado no ofrece garantías, por lo tanto el sistema tiene rentabilidad negativa. Entonces, bajo estas circunstancias, si no se tomaba una determinación como la que tomó la presidenta, como mínimo, había que asumir que va a haber gente con jubilaciones por debajo de la línea de pobreza e indigencia, tanto en el corto como en el mediano plazo”.

El senador prefirió no hacer precisiones en cuanto a las decisiones técnicas en virtud de “no conocer con precisión el proyecto que analizaremos en el Congreso en los próximos dias”, aunque destacó que el mismo “claramente busca que la gente que se jubile cobre, por lo menos, un haber mínimo, especialmente si se recuerda la situación del mercado en la actualidad donde las AFJP han perdido por lo menos un 20 por ciento en el último tiempo”.

En ese sentido, Ríos insistió en algunos de los párrafos que expresaron durante el acto tanto el titular de la Anses, Amado Boudou, como la propia presidenta Cristina Fernández de Kirchner cuando señaló que “en la actualidad, más del 30 por ciento de los jubilados por el sistema de capitalización reciben aportes del Estado para que su jubilación alcance el haber mínimo”.

Por otra parte, el senador correntino recordó que cuando el Congreso aprobó la ley de libertad de opción, “obligatoriamente ingresamos al sistema estatal de reparto a unos 900 mil trabajadores, mujeres de 55 y varones de 60, cuyas cuentas de capitalización tenían hasta 20 mil pesos, porque sus montos de jubilación iban a ser de entre 75 y 325 pesos. Por lo tanto, aunque las AFJP tengan rentabilidad positiva, el problema es cuánto va a cobrar un jubilado cuando termine su actividad. Tal como lo expresó el titular del Anses, los fondos previsionales no están para resolver los problemas del mercado. Los fondos son para que los trabajadores que se jubilen tengan un salario digno”, recalcó.

Finalmente, Ríos reflexionó que “esta decisión presidencial da por tierra con uno de los últimos vestigios de la década liberal en nuestro país, en el mismo momento que en el mundo se están derribando todos las teorías que nosotros y muchos países compramos en esa época”.


Jueves, 23 de octubre de 2008