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Política - Narcotráfico
Crece el escándalo del narcotráfico en Itatí. Intervinieron la cúpula de la Policía Federal por posibles vínculos con narcos
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Viernes, 17 de marzo de 2017

Corrientes (17-3-17): Quince efectivos de la Policía Federal Argentina fueron pasados a disponibilidad y sometidos a una investigación interna relacionada por sus supuestos vínculos con organizaciones criminales de narcotráfico que operaban desde Itatí, y por la que fueron detenidas las autoridades gubernamentales de esa localidad. La sanción fue para los oficiales y suboficiales que prestaban servicios en la Delegación Corrientes de la fuerza de la PFA que fue allanada el martes pasado por orden del juez federal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Sergio Torres.

En ese operativo fue apresado un subcomisario y un sargento, ambos seriamente comprometidos en la causa judicial por traslado de estupefacientes desde Corrientes hasta Buenos Aires, quienes actualmente están detenidos y deberán declarar ante el juez federal Sergio Torres, quien lleva adelante las investigaciones que derivaron en el Operativo “Sapucay”.

Los uniformados detenidos fueron separados de la fuerza luego que el magistrado de Buenos Aires los vinculara a la causa en base a informaciones surgidas de escuchas telefónicas en la que mantienen conversaciones con posibles integrantes de bandas delictivas que intervenían en el tráfico de estupefacientes. Fuentes vinculadas a la investigación revelaron que “están sospechados de quedarse con parte de los cargamentos de marihuana que eran incautados y que luego supuestamente era revendida”.

Según trascendidos, cuando apresaron al oficial de alto rango, éste tenía en su oficina paquetes de marihuana que se sospecha iban a ser reingresados al mercado. En los hechos, la detención del oficial y del suboficial derivó en el descabezamiento de la cúpula y recambio total en todas las dependencias de la región.

Suspensiones preventivas

Las pesquisas internas de la Policía Federal incluyeron a oficiales de muy alto rango que prestaban servicios desde hace más de tres años en la Delegación Corrientes. La búsqueda de nexos con organizaciones traficantes comienza con quienes ocuparon la Jefatura Área VIII de la fuerza de seguridad y estaban a cargo de todas las operaciones en las que intervenían las delegaciones de las provincias de Corrientes, Formosa, Paso de los Libres, Posadas, Presidente Roque Sáenz Peña, Puerto Iguazú, Resistencia.

También fueron pasados a disponibilidad los comisarios que en los últimos años estuvieron a cargo de la dependencia que tiene base de operaciones en Plácido Martínez al 700 de la capital correntina. Éstos tenían como colaborador directo al subcomisario detenido el martes, por lo que también se realizó el recambio en todas las áreas de la segunda línea de mando de la seccional.

La remoción de personal llegó hasta los escalafones más bajos. “Existen efectivos que habían sido trasladados hace dos meses a Corrientes y que también fueron pasados a disponibilidad por esta investigación interna que se realiza”, dijo a NORTE de Corrientes un investigador de la causa. Funcionarios de la fuerza de seguridad intervenida explicaron que “el pase a disponibilidad implica la cesantía de los efectivos mientras dure la investigación”. Lo que se busca establecer es si algunos de éstos tuvieron relación con el desvío de material incautado o si tenían conocimiento de estas actividades.

Están todos detenidos

Además de las detenciones de un subcomisario y un sargento de la PFA, fueron apresados un gendarme y tres policías provinciales. El efectivo de la Gendarmería había prestado servicios en Itatí tiempo atrás, y se sospecha que desde su lugar pudo haber facilitado el transporte de sustancias prohibidas al avisar a los delincuentes los días en que se harían operativos de control vehicular.

En tanto, los efectivos de la Policía de Corrientes detenidos también trabajaban en Itatí. Uno de ellos es el comisario del pueblo, quien en julio del año pasado había sido acusado por los vecinos itateños de “corrupto” luego de un episodio en el que asesinaron a un joven de 23 años de un tiro a quemarropa. Pese a la oposición popular, el jefe policial -de apellido Ocampo Alvarenga- recibió un espaldarazo de la Provincia por medio del ministro de Seguridad, Horacio Ortega, quien lo ratificó en el cargo.

Además del comisario fueron detenidos dos de sus subordinados: el sargento Mario Oscar Molina y la agente Gabriela Natalia Quintana, ambos acusados por el supuesto encubrimiento del transporte de estupefacientes, pero estas tres detenciones no sorprendieron a los vecinos de esa localidad.
Norte Corrientes


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