Corrientes (26-5-17): Mientras que la provincia se encuentra azotada por las lluvias y las inundaciones que, ademas de tener a decenas de miles de correntinos evacuados, a causado perdidas multimillonarias en la producción agropecuaria, el gobernador Colombi hace anuncios de inversiones en obras en clubes de la capital, claramente direccionado a tratar de mejorar la performance de su candidato a la intendencia capitalina, Eduardo Tassano, Un sector de la provincia se encuentra asilado por la caída de un puente en la ruta 12, cuando si se abrían realizado las obras comprometidas con anterioridad tal vez el suceso no hubiera ocurrido. Decididamente Ricardo anda totalmente perdido en las decisiones, producto de la, justamente, pérdida de poder y entendiendo que el destino de ECO, depende en gran medida de la elección de la capital, en donde Fabián Ríos aventaja claramente a Tassano por una diferencia prácticamente indescontable, lo que dejaría a Camau a las puertas de la casa de gobierno, y que ello conllevaría también la revisión de innumerables cuestiones económicas y judiciales de los funcionarios actuales.

Colombi anunció antes de ayer un plan de obras para la recuperación de la infraestructura deportiva. Los que aguardaban obras contra las inundaciones, tendrán que seguir esperando.

El miércoles 17 de mayo el Instituto Correntino del Agua y el Ambiente (Icaa) informó de la aprobación de la resolución Nº 220/17 que habilita la construcción del Canal La Palmira, ubicado cercano al paraje del mismo nombre, en el departamento de Itatí. Al día, siguiente, el jueves (18 de mayo), al atardecer, se vino abajo el puente sobre el arroyo Iribu Cuá, socavado por la correntada del curso de agua que está fuera de cauce como consecuencia de la gigantesca inundación que afecta la provincia. La Palmira se encuentra a pocos paso del puente que se derrumbó, de tal manera que la obra hidráulica que proyectó el Icaa llegó tarde. El expediente del Icaa devino en abstracto desde el momento que el agua arrastró la estructura del Iribu Cuá, cortando la circulación vehicular por la Ruta nacional 12.

Con indulgencia podría decirse que el Instituto Correntino del Agua -lease el Gobierno provincial- llegó con 24 horas de demora, sin embargo la tardanza fue mucho mayor porque el problema comenzó a gestarse hace más de dos meses con el anegamiento de los campos. La idea de la obra “hidráulica y ambiental” tenía como objetivo “reducir los caudales del Estero Riachuelo que hoy se encuentra desbordado y escurre aguas abajo en el riacho Palmira”. Ahora todo esa zona es parte de la gran masa de agua que ha inundado los campos en el límite de Itatí y Berón de Astrada y que determinó el colapso del Iribu Cuá.

¿El Icaa no advirtió la urgencia que tenía la obra? ¿Habrá sido la burocracia o pura negligencia? El hecho refleja la indolencia del Estado (provincial y también nacional) frente a la catástrofe. Los estamentos del Gobierno correntino no estuvieron atentos para prevenir el problema que se avecinaba y aún hoy, con el drama ya desatado, siguen distraídos, embarcados en otros proyectos que resultan superfluos frente a la magnitud de la crisis que vive Corrientes. Por ejemplo, ayer el gobernador Horacio Ricardo Colombi encabezó un acto en la sede gubernativa donde anunció un plan de obras para la recuperación de la infraestructura deportiva en capital y varias localidades más. Aquellos que tenían expectativa de escuchar de parte del Ejecutivo provincial un paquete de medidas para socorrer a las personas afectadas por el agua, paliar los efectos de las inundaciones en las ciudades y mitigar el quebranto de los productores que lo han perdido todo, tendrán que seguir esperando.

Colombi, en este momento, está ocupándose del deporte, de las canchas de fútbol y de básquet, sus prioridades, aunque ahora también sumó interés por el hockey y el vóley. Nada de obras de canalización, ensanchamiento y dragado de riachos o arroyos, limpieza o reemplazo de alcantarillas; nada de terraplenes o consolidación de rutas y caminos estratégicos; ningún auxilio a ganaderos y agricultores que están bajo agua; absoluto desinterés en las familias que hace un mes o más están fuera de sus hogares.

El radical Colombi está enfocado en lo suyo, en el deporte, tal como lo hizo durante sus 16 años al frente de la gobernación provincial. “Vamos a seguir invirtiendo para que cada ciudad tenga una infraestructura deportiva”, dijo ayer en la presentación y pontificó “el intendente que no invierte en deportes, no sabe administrar”. Alguien tendrá que avisarle al hombre que algunos municipios están teniendo un problemita con el agua y no se pueden entretener, en este momento, con el fútbol o el básquet. Colombi, al fin y al cabo está siendo fiel con su ideario; maquillar como gestión la chapucería en los clubes. Así ganó elecciones y permaneció en el poder, así también se hundió la provincia y a la gente le llegó el agua al cuello, literalmente.

Viernes, 26 de mayo de 2017