Bs. As. (15-8-17): Nunca hubo un bochorno tan grande y una muestra clara de manipulación de los resultados electorales como en esta oportunidad al parar el recuento justo cuando Cristina estaba por superar a Bullrich. Las críticas no se hicieron esperar y desde el gobierno en una actitud de hipocresía tremenda lo justificaron aduciendo que en las elecciones anteriores 2013 y 2015 (gobernaba Cristina) el recuento también se suspendió al faltar mas o menos el 5% de los votos, aunque nunca explicaron que en esos momentos los resultados ya no podían cambiar como sucede en esta oportunidad, la diferencia entre Bullrich y Cristina era de un insignificante 0,05% (unos 6 mil votos), además el ministro del Interior informó que no se siguió la carga porque los "telegramas eran ilegibles" cuando por cierto dichos telegramas eran justamente de los distritos en donde Cristina venía ganando en forma contundente (los de los distritos que daban ganador a Bullrich fueron todos cargados ya que eran "totalmente legibles"), también en una insólita y ridicula justificación María Eugenia Vidal responsabilizó al kirchnerismo de la demora en la carga de los votos a que dicho bloque se opuso al voto electrónico. Siempre la culpa la tiene la herencia recibida. Es llamativo que el gobierno nacional que dijo venir a cambiar una forma de gobernar, continuamente usa los mismos métodos que critican bajo el argumento de que se hizo anteriormente. Realmente un Cambio que no cambia nada.



Tanto el jefe de Gabinete como el ministro de interior justificaron la parálisis en el conteo de votos a nivel provincia de Buenos Aires al sostener que no había más telegramas para cargar porque eran ilegibles. Además dijeron que ellos nunca festejaron un triunfo de Esteban Bullrich y que el kirchnerismo fue el que no brindó transparencia en elecciones anteriores.

El jefe de gabinete de Ministros, Marcos Peña, recibió varios cuestionamientos de parte de los periodistas que asistieron a la conferencia de prensa tras las PASO por las denuncias que la ex presidenta Cristina Fernández Kirchner, realizó contra el Gobierno por manipular la carga de datos electorales.

Al respecto no reconoció ningún error y contrariamente dijo que "este proceso electoral fue más transparente con estas herramientas obsoletas que tiene el sistema que en las elecciones anteriores, que estuvieron a cargo del otro gobierno".

"Fue una jornada de mucha paz, no tuvimos ninguna denuncia en ninguna provincia y los argentinos pudieron elegir en qué país quieren vivir, que es lo más importante", sostuvo en la misma sintonía Frigerio.

Los funcionarios de Cambiemos que tanto pregonan el diálogo y el reconocimiento de errores carecieron de estas dos condiciones durante esta jornada. Lejos de reconocer la manipulación de los datos acusaron a Cristina. "Es un extremo cinismo lo que estamos viendo. No se lo cree nadie. Es parte de una estrategia electoral. Estamos seguros que fue más transporte con estas herramientas obsoletas que tiene la nación y que dejó el kirchnerismo, que en los años anteriores", dijo el jefe de Gabinete.

Peña además dijo que "los votantes no son propiedad de ningún partido político". "Vamos a seguir trabajando para convocar a quienes tienen dudas, a quienes no nos votaron ayer o votaron por otras expresiones" lanzó y también un tanto irónico dijo que desde su espacio nunca se dijo que habían ganado cuando salieron a festejar anoche.

Martes, 15 de agosto de 2017