Corrientes (18-3-18): El miércoles de la semana que acaba de terminar, en la Legislatura, se completó el trámite de adhesión de la Provincia a la Ley Nacional Nº 7.328 De los contratos de participación público-privada (PPP), y como si estuviera coordinado, al día siguiente, el jueves, el Gobierno confirmó que está trabajando a todo ritmo en un proyecto de desarrollo costero que tiene el guiño de la Casa Rosada. De hecho, ese día visitó esta ciudad Ramón Lanús, titular del organismo que administra los bienes del Estado nacional, con el que están avanzando -dicen- en la transferencia de las instalaciones del puerto local, entre otros edificios nacionales, como el cuartel del ex Regimiento 9, situado frente al puente interprovincial Manuel Belgrano. En política pocas cosas se dan por casualidad. La presencia del funcionario nacional, justo el día después que la administración radical correntina, podía mostrar la ley para la PPP, libre de ataduras, no parece coincidencia. Lanús, que se reunió con el gobernador Gustavo Valdés, el intendente Eduardo Tassano y el titular del Plan Belgrano, Carlos Vignolo, recorrió la zona costera y ponderó el potencial que existe: Hay que abrirlo para la gente, dijo, palabras más o menos. Esa apertura consistiría en una refuncionalización integral del puerto local, con nuevos servicios y utilidades, quizás con un desarrollo inmobiliario, aunque nadie habla todavía de eso. En el Palacio de 25 de Mayo y Salta se cuidan de no usar el término, pero sus gestores, técnicos y articuladores de negocios hablan sin prurito de un Puerto Madero, correntino. Incluso ya hay bocetos circulando en las redes sociales, son dibujos de estudios de arquitectura, algunos muy vinculados al gobierno de ECO, o mejor dicho, a una parte del radicalismo que está detrás del negocio manos libres que abrió la PPP. Además del Puerto Madero hay otras líneas que explotar, casi todas vinculadas al turismo y a las grandes fiestas de Corrientes.
El gobernador Gustavo Valdés, que recibió a Lanús para avanzar en la transferencia de las instalaciones del puerto, elude referirse al proyecto como “Puerto Madero”, y es lógico, ese título es un resabio del menemismo. Sin embargo, no estaría muy lejos de eso, según especulan en la oposición que observan con desconfianza la utilización del modelo de Participación Público-Privada. Por lo pronto, oficialmente no hay muchos detalles de lo que van a hacer, sí es un hecho que tienen que montar una terminal para los cruceros fluviales, una actividad turística impulsada por el macrismo desde arriba.
Refuncionalizar el puerto, conforme al desarrollo costero, significará desplazar algunos organismos que allí funcionan, por ejemplo Dragado y Balizamiento, repartición que dormita sin presupuesto. También la escuela de Vías Navegables, continuación de la vieja Escuela de Aprendices que era una cantera de personal técnico para los puertos y que ahora se reconvirtió. La comunidad educativa de ese establecimiento está en plena movilización para que le construyan el edificio que le prometieron.
En titular de la delegación Corrientes de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, Adolfo Escobar Damús, manifestó su respaldo al emprendimiento de Desarrollo Costero y lo inscribió dentro del Plan Belgrano (ver aparte).
Todo indica que la herramienta será la Participación Público-Privada, cuya ley se diseñó aquí libre de ataduras, todo queda al arbitrio y discreción del Poder Ejecutivo, por eso los diputados del justicialismo se negaron a votar. Dicen que no está garantizado el control y la transparencia de las operaciones que harán socios al Estado con las empresas privadas.
Es el modelo que impulsa el macrismo para las obras nacionales, y en Corrientes pretenden replicarlo, el “Puerto Madero” está en el tubo de ensayo, pero habría otras probetas: el anfiteatro para el chamamé y el corsódromo para el carnaval. ¿Qué harán con el cuartel del RI9, y la cárcel? El plato fuerte, sin dudas, es el Iberá.
Domingo, 18 de marzo de 2018