Bs. As. (20-2-20): La declaración del equipo técnico del FMI sobre que la deuda argentina no es sostenible reactivó el optimismo sobre una salida al laberinto de la deuda. El pedido a los fondos buitre. Fue una jornada que revitalizó al Frente de Todos y en particular al Poder Ejecutivo que lidera Alberto Fernández y el equipo económico a cargo de Martín Guzmán. El equipo técnico del Fondo Monetario Internacional declaró este miércoles que la abultada deuda argentina "no es sostenible" ni en términos económicos ni en términos políticos.

La declaración fue leída en Casa Rosada como una puerta abierta al diálogo con el organismo multilateral y también a la renegociación con los bonistas privados. Desde el Fondo se expresó, además, la necesidad de que los acreedores realicen una quita de la cifra que debe abonar la Argentina.

Celebro que el FMI reconozca la posición argentina respecto de los procesos de endeudamiento.

Si todas las partes demuestran voluntad de acordar, podremos volver a crecer, honraremos nuestros compromisos y volveremos a tener una Argentina de pie. https://t.co/9gPKRm10eP pic.twitter.com/bPvc5zAY73

— Alberto Fernández (@alferdez) February 20, 2020

“El personal del FMI tuvo reuniones muy productivas con las autoridades argentinas sobre sus planes y políticas macroeconómicas, cuyos lineamientos han sido reiterados la semana pasada por el ministro de Economía, Martin Guzmán, en su presentación en el Congreso de la Nación. Compartimos el objetivo general de las autoridades de restablecer el crecimiento y reducir la pobreza, y al mismo tiempo fortalecer los equilibrios fiscal y externo”, sostiene el comunicado del los técnicos, que firmaron el texto luego de que enviados del Fondo Monetario estudiaran durante una semana las cuentas públicas de nuestro país.

“Las autoridades argentinas están actuando para resolver la difícil situación económica y social que enfrenta el país. Han implementado un conjunto de medidas para atacar la problemática de la pobreza y estabilizar la economía. Se ha buscado aumentar la recaudación en parte para financiar un mayor gasto social”, apuntaron también desde el organismo.

Al respecto, la misión del Fondo subrayó la baja en la inflación desde la asunción de Alberto Fernández, lo cual, además del mensaje principal, funcionó como un abrazo a la flamante gestión del Indec conducido por Marco Lavagna, quien tras el anuncio de la inflación de enero, que fue del 2,3%, debió justificar la cifra acorralado por las especulaciones lanzadas por los medios opositores al gobierno asumido el 10 de diciembre último.

La declaración de insostenibilidad de la deuda que emitió el Fondo se basa en que "el superávit primario que se necesitaría para reducir la deuda pública y las necesidades de financiamiento bruto a niveles consistentes con un riesgo de refinanciamiento manejable y un crecimiento del producto potencial satisfactorio no es económica ni políticamente factible”.

Por esto último es que llama a “una contribución apreciable de los acreedores privados para ayudar a restaurar la sostenibilidad de la deuda con una alta probabilidad”.

Jueves, 20 de febrero de 2020