A 25 años de su asunción, el ex presidente, visiblemente emocionado, dijo que la democracia "aún no cumplió sus principios fundamentales". Cobos se disculpó por su ausencia.
Sentado a un costado de la presidenta Cristina Kirchner, el ex jefe de Estado Raúl Alfonsín recibió un histórico homenaje en la Casa Rosada: un busto en el salón de Pasos Perdidos, a 25 años de ganar las elecciones presidenciales que lo consagraron como el primer presidente electo de la democracia moderna.
"De todos los honores y privilegios que la vida me ha dado, y han sido muchos, jamás hubiera imaginado éste que se me concede", aseguró el líder radical luego de que su compañero de fórmula, Víctor Martínez, y la Presidenta descubrieran el busto. Pero la actual mandataria lo tranquilizaría al término de su discurso. “No se sienta en la obligación de dar explicaciones por este monumento. Usted es el símbolo del retorno de la democracia a la República Argentina”, dijo antes de cerrar el acto.
Alfonsín dijo que aceptó ir a La Rosada en honor a la democracia y no a su persona. "No lo hubiera imaginado, no lo hubiera permitido del mismo modo que rechacé invitaciones anteriores. No interpreto que se realiza un homenaje a mi persona sino a la democracia que logramos entre todos los argentinos", remarcó el primer presidente de la era democrática más duradera de la historia argentina.
En una ceremonia que contó con la presencia de ministros nacionales, altos funcionarios del Gobierno nacional, asociaciones de derechos humanos e integrantes de la Corte Suprema, entre otros, Alfonsín dedicó todo su agradecimiento a elogiar la democracia, que "aún no ha cumplido sus principios fundamentales, pero que cada vez que la perdimos, la inmensa mayoría de los argentinos terminó por perjudicarse".
"Sin solidaridad, la democracia pierde sus verdaderos contenidos. Esta llama debe prender en el corazón de cada ciudadano", indicó. "Le agradezco señora Presidenta el tiempo que destina a este acto que tiene el signo del desarrolo histórico de un país, con sus aciertos y errores con sus nostalgias, sus luchas y sus avatares", agregó el histórico líder de la Unión Cívica Radical (UCR). Lo hizo mirando a los ojos de Cristina, a quien le pidió que "mientras mira al mundo frente a un verdadero pánico, frente a posibles catástrofes, esperemos con sabiduría sepa evitar para nuestra argentina."
Luego de los aplausos, Fernández de Kirchner se dirigió al ex mandatario y le recordó: “Siempre lo llamé Presidente”.
“No se sienta en la obligación de dar explicaciones por este monumento. Es cierto que es un homenaje por los 25 años de democracia, pero sepa que es un homenaje a usted, como persona, porque usted llegó a la Presidencia luego de una larga vida de militante y dirigente político”, subrayó la mandataria.
“La pasión con la que usted defendió sus ideas y la de su partido, y especialmente sus ideas. Además, como Presidente, es usted el símbolo del retorno de la democracia a la República Argentina”, aseguró la jefa de Estado y sostuvo que “a un año y medio del bicentenario, hay que recorrer nuevos caminos”.
El gran ausente durante el acto fue el vicepresidente Julio Cobos, de trayectoria radical pero actualmente expulsado de la UCR por su alineamiento con el kirchnerismo, quien envió una carta a Alfonsín excusándose de tener que cumplir con la presidencia en el Senado.
Raúl Ricardo Alfonsín ganó los comicios electorales el 30 de septimebre de 1983 con Víctor Martínez como compañero de fórmula. Asumió su mandato el 10 de diciembre de ese año y su gobierno no estuvo marcado por la tranquilidad. Se sucedieron hechos históricos como el Juicio a las Juntas militares pero también se aprobó la Ley de Punto Final, favorable a los genocidas, y hubo virulentos episodios como los tres levantamientos carapitandas y la toma del cuartel militar de La Tablada por un grupo guerrillero, entre otros.
Sobre el final de su gestión, el derrumbre económico se aceleró con la hiperinflación y Alfonsín tuvo que abandonar el sillón de Rivadavia antes de lo previsto. El 9 de julio de 1989 renunió para anticipar la entrega del mando a Carlos Saúl Menem.
Jueves, 2 de octubre de 2008