Oficialismo y oposición intentaron consensuar ayer un temario especial para volver al recinto. No hubo acuerdo y la sesión de hoy va camino al naufragio. De ocurrir sería la quinta en seis semanas. Los juicios contra Codello y la indefinición política sobre otros asuntos clave trabaron todo tipo de entendimiento. Los diputados nuevistas Bruzzo, Nazar y Costa ratificaron ayer que no acompañarán ninguna pretensión de enjuiciamiento contra Codello.
Salvo que ocurra un milagro, la Cámara de Diputados ingresará hoy en la sexta semana de inactividad. Sucede que pese a los intentos no hubo posibilidad de acuerdo y todo hace suponer que la sesión de tablas prevista para hoy seguirá el mismo camino que las anteriores: el naufragio.
Si ello efectivamente ocurre, la Cámara baja anotará su quinto fracaso en 45 días, un pobrísimo record del que nadie se hace cargo. Es más, siquiera garantizan revertirlo en el futuro, pues hasta donde se sabe, es probable que la semana entrante vuelva a repetirse la historia.
Las razones, aunque negadas oficialmente, tienen un principio, un fin y varios intermedios.
La génesis de esta profunda desavenencia se sustenta en los pedidos de juicio político contra el doctor Juan Carlos Codello, que cada vez son más. Pero existen otras cuestiones, más bien políticas, que mezclan acuerdos viejos y venideros, internas partidarias y societarias que no pueden sortearse o van camino a ello, pero dejando hilachas que desnutren la otrora fortaleza oficialista.
Y por si fuera poco, aún no se resuelve la situación de Mirta Prieto, la secretaria de cámara que presentó su renuncia pero sin poder usufructuarla para dedicarse a su jubilación porque faltan todavía las últimas puntadas necesarias para zurcir el acuerdo que sentará en en ese sillón a un representante del Partido Nuevo. Eso sí parece determinante. Hubo una serie de reuniones que terminaron por aclarar el asunto y ya no se discute, al parecer, la titularidad de tal Secretaría.
Por lo demás, todo está por verse. Ayer surgieron versiones acerca de la realización de una supuesta sesión especial abortada antes de nacer por imperio de los números mayoritarios opositores. Por esta misma razón moriría la sesión de esta mañana, porque no se logró la redacción de un temario especial sin nada sobre Codello.
Sucede que el Partido Nuevo renovó su negativa a tratar cualquier cosa que implique poner en duda las habilidades del juez de la Corte, postura que deja al oficialismo puro y a sus asociados casi sin ninguna chance siquiera de girar a comisión alguno de los tantísimos expedientes que piden la destitución del magistrado.
Hasta ayer eran once los pedidos de juicio político ingresaros y reservados en la Secretaría del cuerpo, pero avanzada la tarde se registró la ampliatoria de una denuncia y a su vez el ingreso de una nueva presentación contra el ministro por mal desempeño e inhabilidad física.
Una situación de estancamiento que de continuar, condenará al fracaso cada uno de los intentos por sesionar de aquí al infinito. Es que hacen falta números que el oficialismo no tiene, por lo que sólo un milagro haría que al menos una de las presentaciones llegue a la comisión de Juicio Político.
Es una derrota escrita para el oficialismo que intenta ahora erguirse indemne. Por ello la caída casi segura de la sesión de hoy, la quinta en seis semanas.
No obstante, los más optimistas dicen que todo cambiará la semana que viene. Dicen que habrá tiempo entonces para consensuar un temario técnico que posibilite avanzar en algunas cuestiones clave como las leyes de la reforma y otras tantas minucias...
Miércoles, 22 de octubre de 2008