Se han ganado la reputación de estar obsesionados con el sexo (cuando no están intentando obtenerlo, están hablando sobre cómo obtenerlo), pero los hombres también pueden tener secretos sexuales en ciertos temas que no les gusta revelar.
“Normalmente los hombres se sienten cómodos hablando de sexo en términos muy generales –nos explica Susana Genil, sexóloga–. Pero a muchos les cuesta comunicar los detalles de sus inseguridades o de sus deseos, bien porque les da vergüenza o porque tienen miedo a tu reacción.” Como dicen que la información es poder, nos hemos propuesto destapar los secretos sexuales que los hombres ocultan a sus chicas. Para ello, hemos pedido a los expertos que nos ayuden a identificar sus secretos más recónditos. ¿Lista? ¡Más vale que estés sentada!
Dar la talla en la cama
Con tanto porno disponible en la red, los hombres jamás habían sentido tanta presión por sus resultados en la cama como ahora”, dice el psicólogo y sexólogo Pedro Castro. Por no mencionar series como Sexo en Nueva York, que les han enseñado una faceta femenina desconocida: hablamos abierta y, a veces, crudamente de las habilidades sexuales de nuestras parejas. Exactamente, ¿qué le preocupa? “Su mayor miedo es: ¿Es mi pene lo suficientemente grande? Y también, ¿conseguiré que ella llegue al orgasmo?”, explica Castro. Eso ya lo sabíamos, pero los expertos nos desvelan otro miedo muy frecuente: “¿Llegaré yo al orgasmo?”. Para tranquilizarle (a él, no a su pene) hazle saber que estás disfrutando. Gemir y decir: “¡Qué bueno!”, le reafirmará que está consiguiendo su objetivo. Si percibes que le está costando llegar a su clímax, “quita presión sobre su orgasmo como objetivo final”, aconseja Castro, y sugiere tomaros un respiro.
Orgasmos mediocres
Como nosotras, ellos también tienen orgasmos que van desde un “bueno, vale” a un “¡Ay, Dios mío!”, aunque este suele ser uno de sus secretos sexuales mejor guardados. “Las mujeres solemos tocar a los hombres de la misma manera una y otra vez, y pueden hacerse inmunes a esa estimulación –explica la sexóloga Diana Hernández–. Sorpréndele con nuevas caricias o cambiando el ritmo.” Según la sexóloga Cecilia Hidalgo, los ejercicios de Kegel pueden hacer magia. Mientras está dentro, aprieta los músculos vaginales empezando por abajo y subiendo progresivamente por las paredes de la vagina. Cuando ya no puedas apretar más, relájalos. Debería durar unos 10 segundos. ¡Su orgasmo se saldrá de la escala de Richter!
Martes, 25 de enero de 2011