El kirchnerismo mostró los radiogramas que darían cuenta de la participación de la policía provincial en el manejo de datos del escrutinio provisorio. El FPV acusará penalmente al ministro de Gobierno y al hijo del mandatario provincial.

El enrarecido escenario electoral en la provincia de Chubut sumó ayer una nueva denuncia que hizo crecer las sospechas de fraude. La actuación del gobierno provincial de Mario Das Neves en el desarrollo de todo el proceso que terminó en la reñida pulseada entre el kirchnerista Carlos Eliceche y Martín Buzzi, delfín del mandatario y dirigente del Peronismo Federal, volvió a quedar en foco. El Frente para la Victoria (FPV) denunció que Modelo Chubut, la fuerza que lidera Das Neves, utilizó la División Comunicaciones de la policía provincial para montar un “servicio de información paralelo” para transmitir a la Junta Electoral los resultados provisorios del escrutinio de las ciudades de Puerto Madryn y Trelew, que terminaron en escándalo. “Esto es un delito de malversación de caudales porque se utilizó el papel, el membrete y todo el trabajo de la estructura del Estado a favor del partido político de la lista oficialista”, subrayó el apoderado del FPV, Blas Meza Evans. Apenas unas horas antes, el representante legal del kirchnerismo había afirmado que, a partir de los votos “recuperados” en el escrutinio definitivo que comenzó el miércoles, la lista encabezada por Eliceche está “a 300 votos” de Buzzi. Los resultados provisorios habían señalado una diferencia de cinco décimas, un total de 1551 votos. Fue tras conocerse una nueva negativa del Tribunal Electoral provincial a realizar un recuento voto por voto, tal como lo exigieron el FPV y la Unión Cívica Radical.

Anoche, en conferencia de prensa, Meza Evans, Eliceche y el intendente de Trelew, Norberto Yahuar, anunciaron que llevarán la denuncia sobre el rol de la policía provincial durante el proceso de escrutinio a la justicia. Y apuntaron con firmeza al ministro de Gobierno chubutense, Miguel Castro; el subsecretario de Gobierno, Pablo Das Neves, hijo del mandatario provincial; y a las autoridades de la fuerza. Todos serán denunciados en la justicia. “Tenemos en nuestro poder ejemplares originales de radiotelegramas emitidos por la División Comunicaciones de la Policía de Chubut que tienen como destinatarios al Partido Justicialista Lista 2 y donde consta el domicilio y el teléfono del PJ Chubut”, señaló Meza Evans.

El apoderado explicó que esos documentos prueban la existencia de un “servicio de información paralelo a la Junta Electoral provincial a través de los radiogramas policiales”. Y subrayó: “Con esta maniobra el gobierno tenía por anticipado información que no se brindaba ni a la población ni a la prensa. Esto es muy grave porque el objetivo era llegar a un escrutinio provisorio y mentiroso. El Frente para la Victoria no compitió contra otro partido sino contra la estructura del Estado.”

La nueva denuncia del FPV se conoció al cierre de la segunda jornada del escrutinio oficial. Ayer, tras la confirmación de nuevas irregularidades en el recuento provisorio, el kirchnerismo logró recuperar 59 votos mal computados en la ciudad de Trelew para su candidato a gobernador, y reducir la diferencia con Buzzi. “Estamos a 300 votos” del triunfo, proyectó Meza Evans.

Las denuncias del FPV se originaron en los errores detectados entre las planillas de los fiscales partidarios y los datos finalmente volcados a las actas oficiales por las autoridades de la Justicia Electoral de la provincia patagónica. Por eso, el kirchnerismo volvió a reclamar el recuento “voto a voto” y logró sumar en ese pedido a los apoderados del radicalismo. “Es lo único que nos puede dar la certeza del resultado final de la elección”, insistió Meza Evans en declaraciones a CN23.

Como lo había hecho en respuesta a una denuncia formal por “manipulación electoral” del kirchnerismo, el Tribunal Electoral rechazó ayer el planteo para abrir las urnas e ir a un recuento definitivo voto por voto. Aun más, el presidente del cuerpo, Daniel Caneo, difundió un comunicado para llamar a la reflexión a quienes denuncian un posible fraude en los comicios que se celebraron el domingo para definir al sucesor de Das Neves, uno de los referentes nacionales del Peronismo Federal. “Sería muy bueno que digan quiénes son los acusados de fraude, tenemos la oportunidad de defender nuestra honorabilidad porque así somos todos sospechosos”, puntualizó Caneo, presidente de la autoridad electoral y también del Superior Tribunal de Justicia de Chubut. Esa declaración, sin embargo, no fue difundida por la justicia sino por las oficinas de prensa de la gobernación.

Las declaraciones de Caneo buscaron aquietar las críticas al proceso electoral que, con el avance del recuento definitivo de los votos, enrarecieron aun más la tensa relación entre la administración Das Neves y las autoridades partidarias del kirchnerismo y la UCR. Ayer, el gobernador se corrió de la escena mediática y dejó la defensa de la elección en manos de algunos de sus ministros.

A los errores detectados por los fiscales partidarios se sumaron en las últimas horas otros detalles sospechosos que las fuerzas opositoras intentarán confirmar durante el recuento: mesas con más votantes de los inscriptos en el padrón, la aparición de una urna con votos denunciada por la directora de una escuela, y los casos de ciudadanos que se presentaron a votar pero ya figuraban anotados en las planillas, entre otras irregularidades llamativas. “Volvimos a pedir el recuento voto por voto porque ya son demasiados errores que nos hacen suponer que las actas y los telegramas se confeccionaron mal en la mayoría de los casos. Uno de los ejemplos fue la urna de la mesa 83 de Trelew, correspondiente al padrón masculino, donde figuraban 9 votos para la categoría intendente cuando en realidad había 96 boletas” favorables al FPV, subrayó Meza Evans.

Con el desarrollo del escrutinio, el kirchnerismo, y también la Casa Rosada, confía en lograr revertir el ajustado resultado que la administración Das Neves dio por seguro y legal. <


Viernes, 25 de marzo de 2011