Rigoberta Menchú, premio Nobel de la Paz en 1992, ratificó su respaldo a los reclamos de Argentina por Malvinas, durante una visita para firmar en nombre de la fundación que lleva su nombre acuerdos de cooperación con organismos de derechos humanos y la Universidad de Quilmes.




Esta visita a la Argentina de Rigoberta Menchú Tum, ganadora del Premio Nobel de la Paz 1992, coincide con el vigésimo aniversario de que le fuera otorgado el Premio Nobel de la Paz y de la creación de la fundación internacional que lleva su nombre.

Menchú fue recibida ayer con el canciller Héctor Timerman. Esta mañana visitó el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, que funciona en el emblemático predio de la ex ESMA, donde firmó acuerdos de cooperación en nombre de su fundación, y esta tarde hacía lo mismo en la Universidad de Quilmes, donde recibirá además un doctorado honoris causa.

Luego de visitar el lugar donde durante la dictadura funcionó el campo de concentración clandestino, acompañada por el director del Museo de la Memoria, Eduardo Jozami, la Premio Nobel donó a la biblioteca del Museo de la Memoria un ejemplar autografiado del libro "Me llamo Rigoberta Menchú y así me nació la conciencia", escrito por la antropóloga venezolana Elizabeth Burgos.

En diálogo con Télam, la Premio Nobel guatemalteca señaló que esta visita a la Argentina tiene varios objetivos.

"Uno es por supuesto estrechar relaciones con la Cancillería (y) con (la presidenta) doña Cristina Fernández de Kirchner".

"Yo tengo muchos deseos de que podamos abanderar iniciativas más continentales en Unasur con varios intereses que tenemos como centroamericanos, pero también establecer contrapartes en Argentina. Y dentro de toda esta perspectiva, vimos que el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, que es extraordinario, nos hace posible una vinculación de mucha similitud de trabajo", agregó.

Entre estas similitudes Menchú destacó "el resguardo de la memoria; la educación, no sólo sobre el pasado sino sobre cómo visualizar el futuro; la coherencia que podemos tener en cuanto a intercambio de experiencias en materia de derechos humanos, en recuperación de memoria".

Respecto de la visita a la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ), la dirigente guatemalteca señaló que el interés de su fundación es materializar una cooperación académica.

"Es importante para la Argentina y para Guatemala poner los temas de la educación en contexto multicultural. Nosotros hemos avanzado muchísimo con la Universidad de San Carlos (la universidad nacional de Guatemala) en contexto multicultural".

Como contrapartida, Menchú tiene interés en que la UNQ ayude a su fundación en el trabajo de recuperación de la memoria de lo realizado en estos 20 años de vida, "que implica derechos indígenas, de mujeres, una participación activa de muchos pueblos y muchos testimonios y esfuerzos colectivos. Vamos a ver si la Universidad realmente tenga esas condiciones para que juntos podamos sacar adelante esos retos", dijo.

-Usted habló de llevar los temas de los pueblos originarios a la Unasur, ¿cómo es la idea en que trabaja? - preguntó Télam.

- Estamos perfilando algunas iniciativas con el presidente (de Bolivia), Evo Morales, sobre cómo crear una plataforma institucional que nos ayude a visualizar por un lado nuestra mirada hacia los últimos 20 años, donde los pueblos indígenas lograron (avanzar en) muchos temas del derecho; (ver) qué se ha hecho con esos derechos, qué pasó con los fondos del desarrollo indígena en todo el continente. Sería bueno que hagamos una mirada, pero sobre todo cómo proyectar los próximos años.

"Yo creo que esa plataforma continental sólo es posible si ocurre en el marco de la Unasur y sólo es posible si cuenta con el apoyo de los gobiernos progresistas, revolucionarios o de izquierda en América Latina", agregó.

Sobre el final, consultada sobre Malvinas, tema que trató ayer con el canciller Timerman, Menchú destacó en primer lugar su rol de miembro fundadora del Comité Guatemalteco por la cuestión Malvinas, junto a personalidades políticas, sociales y académicas de su país.

"Coincidimos con la postura argentina en el tema de la autodeterminación, de la soberanía, en la perspectiva de que el tema Malvinas es un tema de colonialismo y en la necesidad de que hoy por hoy recuperemos la lucha anticolonial", señaló.

Pero además destacó la coincidencia en que el tema de las islas Malvinas "debe simbolizar una lucha por el diálogo y la solución pacífica", razón por la que desde Guatemala "empujamos las más de 30 resoluciones que no ha cumplido el Reino Unido".


Viernes, 24 de agosto de 2012