Las posiciones y actitudes discriminatorias con los mas pobres quedaron al descubierto en la sesión de ayer en Diputados, al tratarse un proyecto del Diputado Carlos Rubín para aumentar el monto de un subsidio para los mas pobres, lo que generó el malestar del oficialismo que en un claro desprecio por los mas necesitados el radical Manuel Aguirre y el liberal Sitjá y Balbastro se opusieron al aumento de un subsidio que da la provincia a quienes mas necesitan que hoy es de un irrisorio $ 28. Aguirre manifestó que la entrega de subsidios es "vergonzoso" y Sitjá que son "indignos", conceptos que fueron rebatidos por la bancada del PJ, entre quienes el diputador Ramírez Forte les espetó a los oficialistas discriminadores “cuando el subsidio es para los ricos, como por ejemplo a los productores por la sequía, nadie se opuso. Ahora, como es para los pobres, el oficialismo no quiere aprobarlo”.

Caliente discusión destapó el costado más siniestro de algunos diputados

Lo que parecía ser un trámite, en la Cámara Baja se tornó una tormenta, que hizo caer la careta a varios legisladores, mostrando su poca preocupación por los más necesitados, y que hicieron extensiva la misma postura al propio gobierno provincial. Por culpa de estos legisladores, los indigentes seguirán recibiendo, por parte del Estado Provincial, la risible suma de 28 pesos mensuales.

Afortunadamente, es cada vez más normal ver que los debates por proyectos que son tratados en la Cámara de Diputados de la Legislatura, se debaten también desde el plano ideológico. Esto permite conocer más en profundidad a cada una de las personas que “representan” a los ciudadanos correntinos, para analizar que tan comprometidos están con la mejora en la calidad de vida de todos.

En lo concreto, en la sesión de ayer, ingresó al recinto un proyecto del diputado justicialista Carlos Rubín, para que las personas indigentes tengan un apoyo mejor por parte del Gobierno Provincial, ya que hasta el momento sólo 200, reciben la lamentable cifra de 28 pesos mensuales. La posible nueva normativa planteaba que incluir a más gente para el cobro del derecho, y que perciban un mejor ingreso (un cuarto de lo que cobra un empleado estatal).

El tratamiento ingresó con despacho favorable de la comisión de Legislación del Trabajo y antes de ser votado por los diputados, la radical Alejandra Seward pidió que el proyecto sea también tratado por la comisión de Hacienda y Presupuesto. El correcto pedido de la legisladora, fue el inicio de la cruda pelea política ideológica.

Desde la bancada del PJ, férrea opositora de Ricardo Colombi, criticaron duramente al Gobierno provincial por el inhumano trato que tiene con los indigentes. Pero lo peor vino de los diputados Manuel Aguirre (UCR orgánica) y de Alejandro Sitjá y Balbastro (PL).

En un claro desprecio a las políticas de seguridad social que todo Estado está obligado a tener, Aguirre definió a la entrega de subsidios como algo “vergonzoso” y que en realidad la apuesta del Gobierno provincial “se centra en respaldar la producción y la creación de puestos genuinos de trabajo”. Es llamativa esta disyuntiva que creó el radical roza con lo ridículo, ya que por el caudal de ingresos que percibe la Provincia (1000 millones de pesos, únicamente en el primer trimestre) se podría hacer cargo de ambas cuestiones, sin ningún tipo de problemas. Aparentemente para Aguirre, es una cosa o la otra.

En tanto para el liberal las ayudas sociales como “indignas”. Cabe recordar que esas indignas ayudas sociales a los más necesitados que él desprecia, están consagradas como obligatorias en nuestra Constitución Nacional, como parte de las obligaciones del Estado.

Afortunadamente, sí hay legisladores que se preocupan por las necesidades de los que menos tienen, y en una brillante alocución, el diputado peronista Tamandaré Ramírez Forte dijo que “cuando el subsidio es para los ricos, como por ejemplo a los productores por la sequía, nadie se opuso. Ahora, como es para los pobres, el oficialismo no quiere aprobarlo”.

Por su parte, su compañera de bancada, María Inés Fagetti hizo una gran acotación diciendo que está harta de la “cantinela (SIC) de la producción en estos últimos 10 años”. “Pero hasta que pueda dar frutos esta apuesta, en 10 o 20 años, muchos morirán, sufrirán desnutrición. Ellos, para este Gobierno provincial, no tienen justicia social”, concluyó.

Los diputados que se oponen o que critican las “indignas ayudas sociales” deberían tener en cuenta que en el artículo 14 bis de nuestra Constitución Nacional se establece que “El Estado otorgará los beneficios de la seguridad social, que tendrá carácter de integral e irrenunciable. En especial, la ley establecerá: el seguro social obligatorio, que estará a cargo de entidades nacionales o provinciales con autonomía financiera y económica, administradas por los interesados con participación del Estado, sin que pueda existir superposición de aportes; jubilaciones y pensiones móviles; la protección integral de la familia; la defensa del bien de familia; la compensación económica familiar y el acceso a una vivienda digna”.

Viernes, 15 de abril de 2011