Por Carlos A. Pérego
Los hechos acaecidos en el día de ayer con esa patota de vándalos regimentada por funcionarios municipales que atacó, porque fue un literal ataque cuando se comenzaron a arrojar piedras, a Radio Argentina deja en claro que desde el gobierno municipal comenzaron a perder los estribos y utilizan la violencia para acallar las denuncias contra el gobierno más corrupto que conoció esta ciudad. La patota radical organizada y disciplinada por la presidente de la UCR, Concejal Griselda Alegre y el Intendente Eduardo Vischi contó con la complicidad de la Policía de Corrientes que dejó el lugar como “zona liberada”, ya que a pesar de los insistentes llamados llegaron cuando todo ya se había calmado, cortaban el teléfono y luego lo dejaron descolgado.
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Radio Argentina es una emisora que abrió sus micrófonos a todas las voces que eran acalladas en los medios abonados al Intendente y comenzaron las críticas hacia la gestión comunal y a desnudarse una infinita serie de irregularidades, además el medio brindó un apoyo irrestricto a la protesta que mantienen los municipales frente al edificio comunal por la reincorporación de un empleado echado y por la recomposición salarial ya que Vischi abona los salarios más bajos de la provincia, $ 960 de básico, sucesión de hechos que determinó que la Concejal Griselda Alegre, Presidente de la UCR local y el Intendente Eduardo Vischi cometieran el mayor desatino al mandar, o avalar, una patota, compuesta exclusivamente por empleados municipales y del Hospital San José, para ir a “escrachar” y acallar a la radio.
El medio centenar de mujeres y jóvenes que se desplazaban custodiados por los agentes de tránsito y acompañados por las cámaras del canal local por calle Madariaga, luego Uruguay para tomar en contramano por Colón hasta llegar al edificio de Radio Argentina contaron con todo el apoyo municipal fueron vistos en cercanías, e inclusive dentro mismo de los manifestantes, a secretarios municipales, dirigentes de la juventud radical, como el hijo de la presidente de la UCR, Griselda Alegre, quien arengaba a la patota y agredió verbalmente al concejal Walter Fontana (PJ) quien se acercó a solidarizarse con la radio, según versiones la propia Alegre se encontraba en su automóvil a media cuadra del conflicto por calle Brasil frente a la casa de la secretaria privada del intendente.
No pasó mucho tiempo luego de que el grupo de mujeres más exaltadas, todas ellas punteras de Vischi, y entre gritos histéricos en defensa de “Peteco” comenzaron a caer piedras contra el edificio de la radio, arrojadas desde la esquina de Brasil y Colón por un empleado municipal que estaba en el lugar y que oficia a veces de “patovica” personal del jefe comunal.
Esta serie de hechos marcan la razón de quienes no la tienen, la razón de la sinrazón, esa que pretenden tener quienes deben valerse de la violencia para imponer sus pretensiones.
La campaña electoral lamentablemente y por imposición única del Intendente Eduardo Vischi tendrá un grado de violencia inédito en esta ciudad, violencia electoral que se impuso en las elecciones del año 2009 cuando las dos casas partidarias del PJ fueron baleadas en sus vidrieras, hace poco más de un mes y atendiendo a que el PJ logró unir filas, fue atacada nuevamente una de las sedes, sucesión de hechos que ya están dando la pauta de lo que Vischi quiere imprimir en esta campaña.
Desde echar sin motivo cierto a un empleado con inmunidad gremial y 20 años de antigüedad, cortar la luz a quienes protestaban por la reincorporación del mismo y por salarios dignos, hasta mandar una patota para “escrachar” y agredir a un medio y a sus propietarios, marcan claramente que la personalidad ególatra y megalomaníaca del Intendente libreño no reparará en nada ni nadie para tratar de imponer sus caprichos, caprichos estos que han llevado a la precarización total del salario de los obreros municipales y mantiene la ciudad en un abandono notable, en donde lo único que cambió desde la asunción de Vischi en el año 2005 es la situación patrimonial de sus funcionarios, allegados y amigos vinculados de una u otra forma con la comuna.
Ayer terminaron de mostrar la hilacha, pretendieron callar voces opositoras de una prensa que no es adicta a sus intereses, mediante la violencia y la connivencia de la autoridad policial local que no acudió al lugar a pesar de los reiterados llamados; la justicia es un tema aparte, a pesar de que Vischi acumula más de cinco denuncias penales e investigaciones por malversación de fondos, sus silencios son tan llamativos como los gritos histéricos de las manifestantes vivando anoche a su jefe político.
Salvo algunos medios de prensa locales, muy pocos por cierto, el hecho pasó ignorado, nada pasó, y es una clara señal de la bajeza con que se manejan algunos “periodistas en serio” que privilegian unos pocos, o muchos, pesos antes que honrar ni siquiera a la profesión sino a la verdad, al sentido común, a ese derecho por el cual se desgarran las vestiduras hablando de la libertad de expresión cuando avalan con su silencio justamente una ataque a esa libertad por parte del jefe comunal, por cuya caja pasarán seguramente el fin de semana.
En Paso de los Libres definitivamente algo está cambiando, la ciudadanía está despertando y dándose cuenta que fueron engañados por el intendente y que además está instalando la violencia como método proselitista. Pero este cambio propuesto por Vischi conlleva el peligro de enfrentar a pobres contra pobres, a trabajadores contra trabajadores, a libreños contra libreños y es claramente la manera de hacer política de los radicales conservadores que se encuentran instalados en Corrientes y en nuestra ciudad.
Paso de los Libres está a un paso de vivir una desgracia con los problemas que posiblemente sucedan mañana al realizarse el desfile del 25 de mayo frente a la municipalidad cuando los obreros que se encuentran encadenados y con una olla popular queden frente a frente con las autoridades que los oprimen, y teniendo en cuenta la disposición policial para con las ordenes del intendente se puede suponer que existirán órdenes para el desalojo y custodia excesiva de quienes hacen más de una semana se encuentran reclamando por sus derechos.
Realmente lo que se vivió en esta ciudad en el día de ayer fue la razón de las bestias, o en otros términos la razón de la sinrazón.
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Martes, 24 de mayo de 2011