Por Gerardo Aranguren
El Banco Nacional de Datos Genéticos determinó ayer que Marcela y Felipe Noble Herrera no son los niños buscados por las dos familias querellantes en la causa que investiga si fueron apropiados por Ernestina Herrera de Noble. En menos de una hora, los peritos descartaron el parentesco con los Lanouscou Miranda y García Gualdero y continuarán hoy por la mañana con la segunda etapa, que incluye las muestras de personas desaparecidas en 1975 y 1976.
El demorado análisis genético de Marcela y Felipe comenzó ayer a las 10 por orden de la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, y en menos de una hora se obtuvo el primer resultado.
La pericia consistió en una comparación manual de los perfiles genéticos de Marcela y Felipe con los de la familia Lanouscou Miranda, que busca a Matilde, desaparecida desde el 3 de septiembre de 1976, y los Gualdero García, quienes buscan al hijo de Carmen Gualdero, embarazada de nueve meses cuando fue secuestrada, el 8 de junio de 1976.
La misma magistrada se hizo presente temprano en la mañana y dirigió la pericia, en la que también estuvieron la fiscal federal Rita Molina, la directora del Banco, María Belén Rodríguez Cardozo, y los peritos de las parte: Julián Larriba, por Abuelas de Plaza de Mayo; Mariana Herrera, por la familia Lanouscou, y los genetistas Primarosa Chieri y Alejandro Trevisán en representación de Ernestina Herrera de Noble y sus hijos adoptivos.
Al no encontrar coincidencias en los perfiles, los peritos continuarán hoy con la segunda etapa del análisis: la comparación con el ADN de familiares que buscan a niños desaparecidos en 1976 y en 1975. A diferencia de la primera etapa, en esta ocasión la comparación se realizará de manera manual y digital, ingresando los perfiles a la computadora del Banco, por lo que podría demorar más de una jornada de trabajo. Si también resultara negativa, se deberán comparar con todo el archivo del Banco.
Al comprobarse que los jóvenes Noble Herrera no son los niños buscados por las dos familias, estas quedarán excluidas de la causa como querellantes. “La noticia nos generó tristeza porque la búsqueda continúa y quién sabe si los encontraremos”, sostuvo ayer en diálogo con Tiempo Argentino Alcira Ríos, abogada de los García Gualdero, quien contó además que analizaba la posibilidad de un resultado negativo desde que los Noble Herrera sólo querían entrecruzar su ADN con las dos familias. “Eso nos hace suponer que Clarín sabe de quiénes son hijos, pero nosotros no lo sabemos”, agregó.
El abogado de Ernestina Herrera, el ex juez Gabriel Cavallo, leyó la noticia como “un resultado positivo” que podría haber sido obtenido ocho años atrás, cuando los jóvenes aportaron sangre para ser comparada sólo con las dos familias. Finalmente, la medida no se hizo por oposición de las querellas y Abuelas, quienes reclamaron que se comparara con todo el Banco, como lo marca la ley.
La causa ingresó esta semana en la etapa final luego de un pedido de los hermanos Noble Herrera de entregar voluntariamente sangre y saliva, lo que se logró el 24 de junio. El jueves 30 de junio el BNDG terminó de trazar los perfiles genéticos y recién ayer comenzaron con su análisis. Los primeros resultados llegaron más de diez años después de que comenzara la investigación con la denuncia de Abuelas de Plaza de Mayo, el 30 de abril de 2001.
Martes, 12 de julio de 2011