Por Federico Bernal Para Tiempo Argentino
El gobierno británico anunció el envío al Atlántico Sur de uno de los buques de guerra más modernos de su Marina. Esa decisión se suma a una extensa lista de amenazas para boicotear la negociación que reclama la Argentina
Si algo le faltaba a la burda y decadente potencia colonialista era tildar a la Argentina de colonialista y denunciarnos por realizar acciones intimidatorias contra los isleños. Los antecesores de Cameron y Hage solían ser infinitamente más ingeniosos y cínicos a la hora de disparar contra la periferia aún colonizada. Pero nuestros contemporáneos, más que cínicos o ingeniosos, resultan decadentes, tanto como el imperio que les llena los estómagos y bolsillos. Las intimidaciones y provocaciones, tanto a la Argentina y a la Unasur, tienen, sin embargo, el siguiente listado:
1) Profundización de los ejercicios militares en las islas, unilaterales e ilegítimos, en franca violación a las resoluciones de la ONU.
2) Anuncio del envío de un submarino nuclear y de nuevos destacamentos militares a las islas.
3) Anuncio de la partida del buque de guerra HMS Dauntless, el destructor más moderno del mundo, con un valor de 1500 millones de dólares. Para el London Evening Standard (31/1/2012): “El envío de la nave, previsto para fines de marzo, coincidirá con la partida de la Task Force desde los puertos de Portsmouth, con la misión de liberar (sic) las Falklands luego de la invasión argentina de 1982”. Según una fuente anónima de la Royal Navy (The Telegraph – 31/1/2012), la batería de misiles supersónicos que porta el Dauntless “podría derribar toda la flotilla de aviones de guerra de América del Sur, ni que hablar de la Argentina”. Otro anónimo de la Royal Navy manifestó: “Podría derribar los aviones de guerra argentinos ni bien despeguen de las bases. Esto dará a Buenos Aires una pausa para sentarse a meditar.” Un video interesante y sugestivo del navío en cuestión:
4) La partida del Dauntless coincidió con la partida de un buque de igual tipo, el denominado Daring, pero con destino a las aguas del Golfo, en función –informa The Telegraph– del aumento de las tensiones con Irán.
5) El Príncipe Williams está por ser trasladado a las Malvinas este mes, donde permanecería al menos seis semanas. Es decir, el duque de Cambridge, teniente de la Royal Air Force (RAF), estará en las islas coincidiendo con el 30º aniversario del conflicto armado y el desembarco argentino del 2 de abril.
6) El ministro del Foreign Office para América Latina, Jeremy Brown, visitará las islas en junio. A propósito de ello, declaró (The Telegraph – 31/1/2012): “Espero que vea (la Argentina) mi visita por lo que es: un reconocimiento al valor y al sacrificio de los soldados británicos y al de los isleños de las Falklands en la liberación de las islas 30 años atrás.” Una aclaración pertinente: desde 2008 que un funcionario de ese rango y del Foreign Office no viajaba a las islas.
7) En el portal oficial de la Fuerza Aérea británica se describen las operaciones en Libia, Afganistán, Irak y Medio Oriente. Debajo, siguen los Balcanes, Chipre, Diego García y las Falklands.
8) En el portal oficial de la Marina británica, las Falklands figuran al nivel de las operaciones en el Caribe y Medio Oriente. Pegadito, el Golfo y Afganistán. Apenas debajo, las acciones que esta fuerza ejecuta contra el terrorismo, el narcotráfico y la piratería internacional.
9) En marzo de 2009, la Subcomisión de Seguridad y Defensa del Parlamento Europeo hizo público un informe titulado “The Status and Location of the Militaru Installations of the Members States of the European Union and their Potential Role for the European Security and Defence Policy” (dirección en Internet:
10) Intención de extender la reserva marítima alrededor de las Islas Georgias, de los actuales 621.074 kilómetros cuadrados a unos 1,07 millones (3,5 veces la superficie de la provincia de Buenos Aires). Las Georgias se ubican a 1300 km de las Malvinas y a 1700 de la península Antártica. ¿Qué diferencia existe entre esta medida y las zonas de restricción aérea oportunamente impuestas a Libia e Irak? La proyección de poder del informe descripto en el punto anterior tendría su espacio marítimo asignado y ampliado.
11) Últimas declaraciones de Aranguren, presidente de la Shell en la Argentina, entrometiéndose en política interna y estrechando filas con la reacción doméstica, apoyando explícitamente al diario La Nación. Este diario ya se pliega a la posición oficial británica de hacer ver a la política del gobierno nacional hacia Malvinas como una amenaza a la libertad y derechos de los isleños. A propósito, ver artículo del pasado 19 de enero (“La estrategia para cercar a Londres ya comenzó a rodar”). En él, su autor habla de la estrategia kirchnerista para “asfixiar económicamente a los malvinenses”.
12) Profundización de la campaña exploratoria, unilateral, ilegal e ilegítima (iniciada en 1998 por la Shell). Arribo de la segunda plataforma de exploración (costo de alquiler = un millón de dólares diarios).
13) Anuncio de desarrollo de pozos para 2016. Anuncio de extracción de crudo de 150 mil barriles diarios para 2018 (cerca de un 30% de lo extraído diariamente a nivel nacional).
14) Anuncio de un principio de acuerdo entre Rockhopper (operadora británica en Malvinas) con la gigante energética estadounidense Anadarko. Esta compañía tiene entre sus directores a un ex comandante del Comando Estratégico de los Estados Unidos, y a un ex funcionario del Departamento de Defensa. Es decir, Gran Bretaña y los Estados Unidos –a través del Pentágono y del Departamento de Defensa– están trabajando para reeditar en suelo argentino y sudamericano el frente petrolero anglosajón, punta de lanza del intervencionismo militar genocida e invasor.
15) Société General, una de las principales financieras europeas se lanza a la compra de acciones de Rockhopper. Días pasados, la máxima autoridad en Defensa de la Unión Europea respaldó públicamente la posición británica hacia Malvinas.
¿Quién intimida a quién? ¿Quién agrede y amenaza a quién? El listado, además de callar la boca a Gran Bretaña, bien sirve para que el pueblo argentino y sudamericano tome conciencia –como progresivamente lo viene haciendo– de la gravísima amenaza en ciernes. Como en 1982, no les temblará el pulso para imponer a sangre y fuego su barbarie colonialista. <
Miércoles, 1 de febrero de 2012