Daniel Reposo es perseguido y desprestigiado por Clarín y La Nación porque investiga y denuncia sus irregularidades en Papel Prensa. La excesiva difusión de un simple error de tipeo en su CV forma parte del plan de persecución y desprestigio que implementaron estos grupos mediáticos hegemónicos.
Clarín y La Nación persiguen y buscan desprestigiar al Dr. Daniel Reposo debido a que no toleran su actuación como Síndico ante la empresa Papel Prensa, donde marcó centenares de faltas e irregularidades, todas en estado judicial.
En sus constantes embates contra el Síndico General de la Nación y propuesto como Procurador General de la Nación por la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, el diario La Nación publica en tapa del día jueves 10 de mayo de 2012 una “supuesta falsedad en el CV del Dr. Daniel Reposo”. El propio titular de SIGEN detectó el error, lo mandó a corregir y fue publicado por la web del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.
Se trató de un error involuntario de tipeo donde se señala su asistencia al “Espacio para la Memoria y para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos” en el que disertó el Secretario General de las Naciones Unidas, Sr. Ban Ki Moon, hecho ocurrido en junio de 2011. Se debió decir que el Dr. Daniel Reposo estuvo en la jornada en carácter de “Participante”.
Esta campaña orquestada de difamación busca denostar al candidato a la Procuración General de la Nación, quien en su rol de Síndico ante Papel Prensa, entre otras presentaciones judiciales, radicó el 5 de diciembre de 2011 una denuncia penal por asociación ilícita y vaciamiento contra los administradores en representación del capital privado, los grupos Clarín y La Nación, por la comisión de diversas irregularidades en perjuicio de la empresa, del Estado y de la sociedad en general.
La misma quedó radicada en el Juzgado Criminal y Correccional Federal Nº 10 a cargo del Juez Julián Daniel Ercolini.
En esta asociación aparecen sólidamente involucrados Guillermo González Rozas, Alberto Maquieira, Raúl Aguirre Saravia, Jorge Bazán, Daniel Fernández Muñoz, Eduardo Lohidoy, Jorge Rendo y Ricardo Siri, junto con los abogados Víctor Zamenfeld, Javier Lorente y Hugo López, quienes asesoran a la empresa y además representan a los accionistas privados que ejercen el control de la sociedad en todas sus asambleas y toda otra persona que con el devenir de la causa resulte responsable de los hechos denunciados.
El mencionado Raúl Aguirre Saravia es administrador por el capital privado en Papel Prensa y como Presidente del Colegio de Abogados impugnó el pliego del Dr. Daniel Reposo como Procurador General de la Nación. Este dato marca a las claras la relación directa de los grupos mediáticos hegemónicos con la campaña de prensa de difamación.
Los denunciados miembros del capital privado de Papel Prensa, excediéndose en sus funciones, integran una asociación ilícita cuya finalidad es cometer delitos contra el Estado Nacional, conforme se tipifica en el artículo 210, párrafo 1, del Código Penal, son merecedores de 3 a 10 años de prisión.
Entre otras irregularidades, se encuentran las siguientes:
Enriquecimiento sin causa de los miembros del Comité Ejecutivo, el cual pese a integrarse anualmente, dejó de sesionar desde el año 1992 hasta el mes de junio de 2010. No obstante ello, los miembros del Directorio designados para tal fin percibieron salarios aunque por 18 años no adoptaron resolución alguna.
Incumplimiento estatutario por parte del Directorio por no ejercer directamente la administración de la sociedad, la cual es llevada a cabo por su Gerente General, la cual no se pudo verificar que haya sido delegada por el Directorio.
Alto grado de riesgo operacional por falta de transparencia en la gestión de control.
Incumplimiento de la ley de Sociedades Comerciales por incompatibilidades e inhabilidades de los miembros del Comité de Vigilancia y la Comisión Fiscalizadora de parte del sector privado.
Ausencia de un Plan de Inversiones. No incorporó nuevas tecnologías, no mejoró la calidad de su producto, ni incrementó la producción ni cuidó el medio ambiente.
Deficiencias administrativas que posicionan a la sociedad en un estado de virtual anomia e inexistencia de controles internos, lo que promueve desvíos y perjuicios económicos a la empresa.
Política de precio de venta por debajo del costo.
Constantes pérdidas en el estado de sus resultados trimestrales, con disminución de valores nominales y caída en las ventas.
Sistemática desinversión en su equipamiento industrial, desidia en la gestión comercial, ausencia de desarrollo de nuevos mercados y clientes, falta de foco en la gestión y falta de ajuste de gastos.
Por otra parte, dentro del marco de irregularidades, se destaca una licuación de deuda millonaria a favor de Clarín y La Nación, perjudicando al resto de los socios y clientes de Papel Prensa.
En una irregular Asamblea, aprobaron la pesificación de la deuda en dólares que poseían, con una quita del 72,6% sobre los intereses. La Nación fue favorecida con 32 meses de gracia para los pagos y se le establecieron 8 cuotas anuales con solo el 2% de interés.
Clarín fue favorecido con la misma quita y beneficios, con un cronograma de 50 cuotas mensuales.
Además, en otra circunstancia, en el año 2010, Clarín y La Nación compraron la totalidad del stock de papel dos días antes del aumento de precio, generando pérdidas para la empresa Papel Prensa y una acción perjudicial para sus competidores del mercado gráfico, toda vez que utilizaron en beneficio propio información confidencial.
Jueves, 10 de mayo de 2012