Para darle valor agregado a lo que producen, más de 30 familias nucleadas en Coapigral abrirán una fábrica de turrones y alfajores. Lo harán con subsidio de la embajada de Australia que ya financió un proyecto de elaboración de dulces y mermeladas.

100 kilos de dulces por semana producen Coapigral en invierno, la temporada de mayor venta.

La actividad apícola está regulada en Libres por una ordenanza que fue impulsada por la cooperativa. Aseguran que buscan proteger una de sus principales fuentes de trabajo.

Hace tres años surgió como una alternativa laboral para un grupo de familias. Ahora, la Cooperativa Apícola y Granjera Libres (Coapigral) no sólo produce y comercializa miel sino también mermeladas, dulces y diferentes productos. Así, con esfuerzo y el aporte de diferentes organismos continua creciendo en número de integrantes y rindes. En dos semanas pondrán en funcionamiento una fábrica de alfajores y turrones, cuya maquinaria adquirieron con fondos otorgados por la Embajada de Australia.

"Actualmente son 38 socios de Libres, La Cruz, Alvear, Guaviraví y Monte Caseros que se dedican a la apicultura y diferentes actividades agrícolas como el cultivo de cítricos", dijo a El Litoral la presidenta de Coapigral, Silvia Nobles. Señalando en este punto que a los diferentes productos que obtienen buscan darle un valor agregado a fin de obtener mayores ingresos.

Por esto, de forma permanente gestionan financiamiento tanto para mejorar la producción apícola como así también desarrollar nuevos proyectos. Tal es así que en enero, con aportes de la Embajada de Australia, comenzaron a elaborar dulces y mermeladas de zapallo, cítricos y mamón. Frutos extraídos de los cultivos de los socios.

"Nos está yendo muy bien, vendemos a los comercios y de forma directa a los consumidores", indicó Nobles. Asimismo agregó que "y con la apicultura también estamos obteniendo buenos resultados pero como aún nos sigue quedando un remanente decidimos abrir la fábrica de turrones y alfajores".

Un proyecto que también será financiado con fondos australianos. "Es que al observar que había funcionado la venta de dulces, decidieron extendernos el subsidio para comprar los elementos que necesitamos para la nueva fábrica", explicó el presidente de Coapigral. Tal es así que en los próximos días luego de poner en condiciones las instalaciones, se iniciaría la nueva actividad productiva.

"Está diversificación funciona porque dentro de la cooperativa existen varios grupos de trabajo, algunos se encargan de capacitar, otros de gestionar fondos, de comercializar los productos y así nos vamos complementando", señaló Nobles. Destacando en este punto que "si bien hemos crecido en estos años, seguiremos trabajando para poder seguir avanzando y asegurando el bienestar de muchas familias".

Domingo, 9 de noviembre de 2008