(18-6-14): En un partidazo con golazos y muchas situaciones de gol, la Naranja sumó de a tres y quedó muy cerca de ser el primer clasificado a octavos de final.




Cuando juega Holanda hay promesa de buen fútbol y goles. O al menos eso quedó demostrado tras sus primeros dos cotejos en Brasil 2014. Después de la goleada histórica a España, hoy le ganó 3 a 2 a Australia en un partido muy emocionante y cambiante tanto en el marcador como el juego. El equipo de Van Gaal ya ha mostrado sus cartas: no domina la pelota, se abroquela bien atrás e intenta salir de contragolpe o con balones largos hacia sus delanteros Robben o Van Persie. Este sistema le ha funcionado para ser el equipo más goleador del campeonato pero también ha demostrado varias falencias en la zona defensiva y serios problemas para construir juego colectivo. Como sea, no hay dudas de que Holanda se ha convertido en uno de los candidatos más serios del Mundial.

Australia, al borde de la eliminación, aún maldice el sorteo que lo llevó al Grupo B junto a España, Holanda y Chile. Tal vez contra otros rivales podría haber llegado más lejos. En el match de hoy demostró tener los jugadores y el convencimiento táctico para enfrentar de igual a igual a una potencia del fútbol mundial. Además el golazo de Tim Cahill emulando a Marco Van Basten con una volea de zurda quedó para el recuerdo.

Holanda es el equipo más goleador del campeonato pero también ha demostrado varias falencias en la zona defensiva

A la Naranja el partido le costó más de lo esperado. La presión alta de Australia no le permitió desarrollar el juego que tenía planeado. Así y todo una falla en la defensa rival, le permitió a Arjen Robben explotar al máximo su velocidad, abrir el partido con un golazo y convertirse en uno de los goleadores de Brasil 2014. Sin tiempo para respirar, llegó el golazo del empate de Cahill y no hubo mayores cambios hasta el entretiempo.

Sobre el final del primer tiempo, Van Gaal ante la lesión de uno de sus defensores centrales(Martins Indi) decidió mandar a la cancha al juvenil Memphis Depay y cambió así el esquema táctico de 5-3-2 a 4-3-3. Ese ajuste cambió a Holanda y al partido.

El segundo tiempo se hizo abierto y con posibilidades de gol para ambos lados. Se adelantó Australia tras un penal mal cobrado. Lo empató Van Persie con toda su categoría (también llegó a la cima de la tabla de goleadores) y lo ganó el ingresado Depay con la ayuda de las manos débiles del arquero australiano.

Para Australia es el fin de una ilusión pero se marcha- por ahora- con la frente en alto. Holanda tiene en Robben y en Van Persie, a dos de las estrellas del Mundial y por ahora el mayor poderío ofensivo. La incógnita es si con eso le alcanza o no para ser candidato a levantar la Copa del Mundo por primera vez.

Miércoles, 18 de junio de 2014