Al menos 22 personas murieron hoy por un alud en una carretera rural en Alta Verapaz, unos 200 kilómetros al norte de la ciudad de Guatemala, pero se teme que la cifra de muertos pueda ser aún mayor, confirmaron las autoridades locales.
“Los testigos dijeron que aproximadamente 140 personas caminaban por el lugar cuando ocurrió el deslizamiento de tierra”, dijo el vicepresidente guatemalteco, Rafael Espada, según un cable de la agencia DPA.
El alud se produjo en una carretera que conduce de San Cristóbal, departamento norteño de Alta Verapaz, a la población de Chicamán, en Quiché, a unos 200 kilómetros al norte de la capital.
Espada ofreció una conferencia de prensa en la sede de la gubernamental Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), en la que ofreció detalles sobre lo sucedido.
El temor a un nuevo desprendimiento hizo que los socorristas suspendieran las labores de búsqueda de más cadáveres. Las víctimas eran campesinos que habitaban en poblados cercanos.
El derrumbe, del cual también se consiguió rescatar a 15 sobrevivientes heridos, destruyó al menos un kilómetro de carretera, informaron las autoridades de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred).
El deslizamiento ocurrió en el mismo sitio donde hace dos semanas se produjo otro desprendimiento de tierra que dejó dos muertos y tres desaparecidos.
El portavoz de la Conred, Hugo Arvizú, afirmó que ya se había advertido a la población sobre el peligro de pasar por el lugar.
Espada anunció que expertos analizarán el terreno para determinar las causas del deslizamiento y definir la estrategia para continuar la búsqueda de víctimas.
Lunes, 5 de enero de 2009