El premier Ehud Olmert (foto) dijo que se abrirá "por tiempo limitado". Ya hay 660 palestinos muertos y casi 3 mil heridos. La locura de Israel no reconoce entre culpables e inocentes y llamativamente las únicas víctimas son palestinas según todos los partes de prensa. Demencia total.
Israel aceptó la apertura de un corredor humanitario en la franja de Gaza, pero sigue negándose a poner fin a una ofensiva militar que el martes mató a 43 personas en una escuela de la ONU. En el frente diplomático, el presidente egipcio Hosni Mubarak anunció que ha invitado a israelíes y palestinos a una reunión de emergencia para intentar poner fin al conflicto. El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo que visitará la semana próxima Israel, los territorios palestinos ocupados y varias capitales árabes.
La ofensiva israelí ha costado ya la vida a al menos 660 palestinos y herido a más de 2.950 desde su comienzo el 27 de diciembre, según los servicios de emergencia palestinos. Seis militares israelíes murieron y 79 resultaron heridos desde el comienzo el sábado de la ofensiva terrestre, según un balance oficial.
En la madrugada de este miércoles la oficina del primer ministro israelí Ehud Olmert anunció la apertura de un "corredor humanitario" en la franja de Gaza para "prevenir una crisis humanitaria".
"Ello implica la apertura de sectores geográficos por periodos limitados de tiempo durante los cuales la población estará en condiciones de recibir ayuda", añadió la oficina, sin precisar la fecha en que será abierto dicho corredor.
Las agencias de la ONU y las organizaciones humanitarias han denunciado una crisis humanitaria "total" en la franja de Gaza, un territorio pobre y superpoblado, donde la población civil se encuentra atrapada sin posibilidad de huir, mientras que la ayuda de emergencia está bloqueada por los incesantes combates. La operación militar del Estado hebreo ha conllevado ahora más penuria de alimentos de primera necesidad, carburante y agua potable, además de cortes de electricidad.
Sobre el terreno, los combates entre activistas palestinos y soldados israelíes continuaron el martes en la ciudad de Gaza, concretamente en los barrios de Zeitun, Chujaiya y Tufa, así como en las zonas urbanas del norte y del sur del territorio.
Tres escuelas gestionadas por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) fueron bombardeadas. En el ataque más mortífero, en Jabaliya (norte), murieron 43 palestinos, según los servicios de emergencia locales. En un comunicado, la ONU hizo un balance de 30 muertos y 55 heridos. Israel afirmó que su ataque fue una respuesta a disparos de obuses procedentes de esa escuela.
Sin embargo, fuentes palestinas señalaron que en la escuela se hallaba la gente que se había refugiado allí tratando de huir de los enfrentamientos en esa y otras zonas.
Horas antes, otras cinco personas murieron en ataques israelíes en sendas escuelas de la UNRWA, una en Jan Yunés (sur de la franja) y otra en el campo de refugiados de Shati, en la ciudad de Gaza, señalaron fuentes médicas.
Además, 12 miembros de una misma familia, siete de ellos niños de entre 1 y 12 años, fallecieron en el bombardeo de su casa en la ciudad de Gaza. Ban Ki-moon calificó de "totalmente inaceptables" los ataques israelíes contra las tres escuelas de la ONU, sobre todo porque "el gobierno israelí fue advertido de que sus operaciones estaban poniendo en peligro instalaciones de la ONU".
"El ataque contra la escuela de la ONU muestra que la guerra no está dirigida contra Hamas sino contra todo el pueblo palestino", dijo por su lado el portavoz de Hamas Fawzi Barhum, cuyo movimiento controla Gaza.
El jefe de operaciones de la UNRWA en Gaza, John Ging, dijo que la situación es una "tragedia horrible". "Todo el mundo está aterrorizado porque no hay refugios para huir de la violencia", aseguró.
Pese a las presiones internacionales, Olmert reiteró el martes los requisitos para que la operación en Gaza termine. "Que los actos de terrorismo cesen, que cese el contrabando de armas desde el Sinaí (egipcio) hacia Gaza, y los combates israelíes cesarán", dijo.
No obstante la ofensiva israelí, 34 nuevos cohetes fueron disparados el martes contra Israel, según el ejército. Cuatro israelíes han muerto por esos disparos desde el 27 de diciembre.
Uno de los cohetes del martes alcanzó por primera vez la ciudad de Gedera, a más de 45 km al noreste de la franja de Gaza, hiriendo levemente a un bebé.
El ejército israelí señaló haber matado a 130 militantes de Hamas desde el comienzo de la fase terrestre de su ofensiva.
En Charm el Cheij (Egipto), Mubarak anunció, tras una reunión con su homólogo francés Nicolas Sarkozy, que su país invita a israelíes y palestinos para discutir sobre "la seguridad en las fronteras", "la apertura de puntos de paso fronterizos" y "el levantamiento del cerco" en la franja de Gaza.
Sarkozy, que el martes visitó Damasco y Beirut, llamó a Siria a presionar a sus aliados de Hamas para buscar el final de los combates.
En Nueva York, el Consejo de Seguridad de la ONU reinició el martes de noche un debate para abordar las posibilidades de un cese el fuego en la franja de Gaza.
A la reunión ministerial, presidida por el canciller francés Bernard Kouchner, también asisten entre otros el presidente de la Autoridad Palestina Mahmud Abas y la secretaria de Estado norteamericana Condoleezza Rice.
En América Latina, el gobierno venezolano ordenó este martes la expulsión del embajador de Israel en Caracas en protesta por la ofensiva del ejército israelí en la franja de Gaza y en solidaridad con el pueblo palestino.
Por su lado, Ayman al Zawahiri, número dos de Al Qaida, llamó a los musulmanes a atacar Israel y objetivos occidentales y acusó al presidente electo estadounidense Barack Obama de complicidad con la ofensiva israelí contra Gaza.
Miércoles, 7 de enero de 2009