(17-12-14): San Lorenzo viajó a Marruecos con muchas valijas llenas de ilusión. Su primer "obstáculo" antes de la final era el modesto Auckland City. Pudo sacarse de encima al rival al vencerlo en tiempo sumplementario por 2-1. Fue más duro de lo que había planeado, el conjunto semi-profesional opouso mucha resistencia. Ahora enfrentará a Real Madrid por la final del Mundial de Clubes.
San Lorenzo intenta por arriba. Ahora Mario Yepes que gana pero su remate se va lejos. Está cómodo en el campo de juego el Ciclón, juega con tranquilidad y mucha pausa. No se apura, intenta mantener la pelota en sus pies sin perderla.
Pero contesto el Auckland City con Tade desde afuera del área. Se quitó de encima a Walter Kannemann y Mario Yepes, remató pero Sebastián Torrico estuvo firme.
El encuentro ingresó en una meseta, se hizo lento y aburrido. A pesar de que el conjunto de Edgardo Bauza intentó y progresó en el campo de juego rival le costó generar peligro.
Pero sobre el final de la primera parte, el hombre de los goles importantes en la Libertadores, Emmanuel Mas envió un centro atrás para que Pablo Barrientos se acomode y le pegue de zurda abajo. 1-0 antes del descanso y toda la tranquilidad.
En el inicio del complemento el uruguayo armó una gran jugada, se sacó tres hombres de encima pero Ángel Berlanga se recompuso y llegó a tiempo para quitarle el balón.
Siguió manejando la pelota, ya con más ritmo que los primeros 45, aunque con algunas imprecisiones en especial de Néstor Ortigoza que se gana una amonestación. El elenco neocelandés se empezó a animar por momentos aunque nunca pudo vulnerar el mediocampo azulgrana.
Pero llegó el baldazo de agua helada para el Ciclón. Bauza se disponía al cambio de Leandro Romagnoli por Gonzalo Verón cuando llegó el tanto de Ángel Berlanga luego de un espectacular pase del argentino Tade. Desde un lugar imposible el español marcó el 1-1 a los 25 del complemento.
A partir de ahí San Lorenzo fue en busca. Se despertó y le dio mayor explosión. Cauteruccio estuvo cerca de poner rápidamente en ventaja nuevamente a su equipo pero el palo se lo impidió. Aunque una jugada de contra del rival casi termina en el segundo. Tade quedó mano a mano con Torrico que debió salir con velocidad para cerrarle el ángulo.
Se consumieron los 90 minutos y el encuentro finalizó 1-1. Luego de una charla técnica dura, el Patón le abrió la cabeza a sus jugadores. A los tres minutos del alargue, el goleador Mauro Matos (había ingresado por Cauteruccio en el segudo tiempo) marcó el 2-1 tras un rebote.
Unos minutos después, el ex All Boys pudo haber marcado el tercero. El rompió las manos al arquero que sacó una pelota clave. Pero finalmente concetó su sueño y su objetivo. Quería y debía ganar. Enfrentó a un equipo menor, en los papeles. Le costó mucho pero ya está en la final. Ahora se viene Real Madrid el sábado. Será otro partido y a pesar del desgaste, en el fútbol todo es posible.
Miércoles, 17 de diciembre de 2014