La concesionaria del servicio terminó de construir un sistema de rebombeo de agua natural que está en proceso de pruebas y se pondrá en funcionamiento en los próximos días. Esto permitirá que aumente el caudal de agua que ingresa a la planta potabilizadora para su tratamiento.
En el comunicado de la empresa la misma admite que el agua es APTA PARA EL CONSUMO, pero la misma no es POTABLE, según el Código Alimentario Nacional, que debería ser el agua que Aguas de Corrientes debiera entregar a sus clientes de acuerdo al Convenio de Concesión.

En los próximos días, se pondrá en funcionamiento el Sistema de Rebombeo de Agua Natural (Booster) recientemente construido y actualmente en proceso de pruebas y ajustes operativos en la ciudad fronteriza de Paso de los Libres.

Este sistema consiste en la instalación de una bomba de alta capacidad que rebombeara el agua natural desde la toma ubicada en el puente internacional hacia la planta potabilizadora, permitiendo así aumentar el caudal de agua cruda para su tratamiento.

Para ello se ha construido totalmente con tuberías de acero blindado, un by-pass en la cañería de impulsión de agua natural en la zona del Complejo Terminal de Cargas (Cotecar), instalándose sensores de presión que proveen información a un convertidor de frecuencia, que corregirá el caudal de rebombeo según la demanda y las variaciones del volumen, captado debido a las distintas alturas del río Uruguay.

El automatismo instalado se complementa con el ya existente que controla las bombas en la toma del Puente Internacional, lográndose un sistema autónomo y con altísima confiabilidad.

La construcción del by-pass y las pruebas necesarias para la puesta a punto del sistema obligó a interrumpir la captación de agua natural de la toma del Puente Internacional. Por esa razón, como parte de las obras del sistema de rebombeo y con el fin de evitar la suspensión del servicio, se ha construido una toma provisoria en la costanera local.

Esta toma capta el agua natural por medio de una electrobomba de 150 HP y la conduce a través de mil metros de cañería hasta la planta potabilizadora de Aguas de Corrientes. Gracias a esta instalación, fue posible evitar la suspensión del servicio para realizar estas tareas.

De este modo, los técnicos pudieron interrumpir durante 48 horas la provisión de agua natural proveniente de la toma del Puente Internacional, mientras se conectaba el by-pass, sin producir disminución en las presiones del agua potable que llega a los hogares de los vecinos.

Actualmente esta toma provisoria funciona en forma intermitente y complementa el caudal captado en la toma del puente internacional, mientras se calibra y se realizan las pruebas en el sistema de rebombeo.

Viernes, 16 de enero de 2009