Por Carlos Pérego
En la editorial que escribí no me quejo en ningún momento de los opinólogos ni lo hago peyorativamente, de hecho opino continuamente y lo hago convencido de lo que digo y convencido que no es la verdad absoluta ni mucho menos, remarcaba solamente, y no era precisamente por el amigo Gabriel Link o por algún medio en particular, que llama la atención que a pesar que en todos los partidos existen situaciones similares y aún peores, la pelea del radicalismo correntino no tiene retorno ni elecciones internas, pero parecería que es un tema menor, solamente lo que importa es la situación del peronismo.

El peronismo es un partido continuamente críticado y por ende acostumbrado a las mismas, a pesar de ellas sigue siendo el mas importante del país y en nuestra provincia y ciudad ocupa un lugar de relevancia, aunque es cierto que existen y siempre existieron y seguramente existirán diferencias de criterios.

Todos los periodistas tienen derecho a opinar no solo del PJ, sino de todos los partidos que hacen a la vida política de nuestro país, y además es una obligación hacerlo.

Los peronistas somos sin duda incorregibles, como decía Borges, pero también el mismísimo Borges aceptaba que el peronismo, no era solamente un partido político sino un movimiento político, algo que le agradaba menos aún.

Militar es estar con la gente, es formar parte de la misma es tener el sentido de pertenencia a algo, a un grupo, a una idea, no es seguir a tal o cual persona, de hecho el militante sigue a un líder, pero en el convencimiento de estar haciendo lo correcto para estar con la gente, para trabajar en su dignificación, por ello a pesar de que se puedan seguir a diferentes líderes, siempre se confluye en un punto, en el sentido de pertenencia al peronismo y en el trabajo que el representa.

Los peronistas no somos seres superiores somos seres necesarios, y quienes nos analizan llegan a la misma conclusión, la historia reciente de nuestro país así lo muestra, pero no somos mejores ni peores que nadie, somos iguales.

Tampoco los peronistas tienen un “peronólogo”, para determinar quien es mas o menos peronistas, hay si dirigentes de diferentes categorías que muchas veces dirimen sus diferencias por los medios, pero ninguno es mas que otro.

Ser peronista es un sentimiento, es algo que no se puede cuantificar ni calificar, uno es o no peronista, y es la solidaridad una de las cualidades del ser peronista, es el pelear por la igualdad, de hecho el peronismo fue el gran igualador de oportunidades, todos tenían las mismas chances, los ricos y los pobres, eso es de alguna manera ser peronista y por supuesto el amor y el respeto por nuestros máximos líderes.

Los peronistas tenemos de hecho la responsabilidad de aceptar que pelearnos entre nosotros, pero tampoco es un error advertir que desde diferentes sectores se puede incentivar las divisiones, por cierto existen intereses creados para ello y en nuestra provincia y ciudad los únicos que pueden verse beneficiados por la división del peronismo es algún sector radical, y esa sí es una verdad absoluta.

Eso es el PJ, y como decía en la nota anterior, “nadie los quiere, pero todos lo quieren”.

Ah! y lo de la Gata Flora, es por que para algunas personas, o periodistas, “opinólogos” no, lo que hace el peronismo, al menos de mi modesto punto de vista, nunca esta bien, si en un acto político van 500 personas, se las acarreó o pagó, si van 100 es un fracaso, si se habla de unidad es mentira y si se dividen son incorregibles, si vamos a internas nos vamos a dividir, pero si se acuerda entre las partes se convierte en contubernio, es decir que se haga lo que se haga, hay personas a las que nada les parecerá bien, y bueno allá ellas.

Y sí, es verdad que al ser hombre público o funcionario son pasibles de críticas, de hecho es conveniente que se lo haga, ya que a partir de las mismas algo se podría corregir si hay algo malo, pero no cuando la intencionalidad en la crítica es otra.

Y para culminar lo vuelvo a repetir, en ningún momento la nota en cuestión era una queja, era la descripción de una realidad, y más allá lo que pueda opinar yo, no “mis ocasionales compañeros”, lo decía el Gral. Perón “La única verdad es la realidad”.


Viernes, 16 de enero de 2009