Lo destacó ayer, en diálogo con “época”, el médico pediatra y ginecólogo Hipólito Sodero. Fue en el marco de la iniciativa ciudadana que reunió a más de 70 tutores de Capital, preocupados por las múltiples problemáticas que afectan a los jóvenes.
Un viejo y conocido refrán dice que “la unión hace la fuerza”. Y eso se observó ayer cuando más de 70 padres se congregaron, poco después de las 9, en el salón de reuniones de la Asociación para la Producción, Industria y Comercio de Corrientes (APICC) para interiorizarse de una iniciativa ciudadana que apunta a que los adultos comiencen a actuar frente a las múltiples problemáticas que afectan hoy a los jóvenes.
La convocatoria se venía realizando hace varias semanas por distintos medios de comunicación como una forma de encontrar diálogo y soluciones al avance de conductas de riesgo en los adolescentes y jóvenes, generadas muchas de ellas por el consumo del alcohol y las drogas.
Paradójicamente, la cita coincidió en el día después de un triste accidente que generó gran conmoción en la sociedad correntina y el país. Tres jóvenes murieron trágicamente en la madrugada del viernes, luego de que el auto en que se trasladaban a alta velocidad perdiera el control cuando corrían carrera con otro vehículo por una de las arterias de la Avenida Independencia.
Conformados en cuatro grupos de alrededor de 15 personas, la reunión consistió en un taller de participación cuya primera etapa tuvo por objetivo la conformación de listas con las problemáticas más comunes que los padres observan en el crecimiento de sus hijos y la definición de los posibles planes de acción.
Sorprendidos por la cantidad de padres presentes y con las expectativas superadas, el empresario Horacio Ognio, el médico pediatra y ginecólogo Hipólito Sodero y Alberto Medina Méndez, impulsores de la iniciativa “Padres Comprometidos”, coincidieron en la necesidad de que se conforme un equipo comprometido con aquellos problemas y cuestiones que ponen en riesgo la vida y la salud de los hijos.
“Establecer límites razonables a nuestros hijos no es un pecado”, resaltó en diálogo con “época” Sodero, buscando dejar un claro mensaje a los padres insistiendo en la importancia de que se ponga mayor atención en las conductas y acciones de los adolescentes.
Basta de escondidas
“El asunto central en esta cuestión es la inacción y la distracción, porque estamos jugando a las escondidas con nuestros hijos. No esperemos que pasen las cosas para después recién ver qué hacer”, sentenció el médico, agregando que “lamentablemente tuvimos este terrible accidente que nos hace repensar muchas cuestiones”.
El taller duró poco más dos horas y, durante la primera, distintos miembros de la asociación civil "Padres en las Rutas", del Chaco, contaron su experiencia. Inclusive algunos de los presentes aprovecharon para plantear sus problemáticas, sus dudas, y en algunos casos hasta sus miedos.
La exposición y el debate se orientó hacia la necesidad de plantearse un objetivo único y concreto, “y no derivar en varias problemáticas: hay que enfocarse en algo en particular que se quiere cambiar”, especificaron los chaqueños.
“Que esto no sea sólo un impulso, porque todos los que estamos hoy aquí somos conscientes que los adultos somos responsables de las cosas que les pasan a nuestros hijos. Por esa misma razón, no le podemos estar pidiendo siempre a los jóvenes que sean constantes si nosotros mismos no estamos dispuestos a serlo”, expuso Medina Méndez.
A modo de autocrítica y hablando un poco por todos, el médico pediatra y ginecólogo que en su momento estuvo encargado del Programa Provincial de SIDA, pero que ayer habló también como padre, hizo hincapié en que se responsabiliza a la Policía, a los gobiernos y a los maestros “de no hacer lo que deben hacer, como si ellos fueran quienes deben ocuparse, cuando no es así; les estamos entregando una responsabilidad que es nuestra, y es hora, de una vez por todas, de que nos ocupemos de nuestros hijos”.
Próximas reuniones y acciones
El taller “Padres comprometidos” iniciado ayer en las instalaciones de la Asociación para la Producción, Industria y Comercio de Corrientes (APICC) definió futuros encuentros y planes de acción.
En la oportunidad, madres y padres que trabajan muchas horas y están fuera de sus hogares por tal motivo, definieron a la droga, el tabaco, el alcohol, la violencia, el delito, los accidentes de tránsito, la inseguridad, la incomunicación que genera Internet y la influencia de los medios como algunas de las dificultades con las que se encuentran a la hora de relacionarse con sus hijos y aseguraron no saber qué hacer.
Por dicha razón, con las conclusiones alcanzadas en el primer encuentro, se concretará dentro de dos semanas una nueva reunión el sábado 31 con la presencia de profesionales que se ocuparán de ayudar a comprender los problemas de los adolescentes y así poder encontrar soluciones ante determinadas circunstancias.
La idea planteada es concretar cada 15 o 20 días una nueva reunión y la propuesta es replicar algunas ideas que lleva adelante el grupo “Padres en Acción” en el Chaco, pero también “generar propuestas propias”.
Dicen que si no hay alcohol, no hay fiesta
El 90 por ciento de los jóvenes correntinos encuestados por la Dirección de Tránsito Municipal, en un último sondeo realizado a través de un convenio con la Universidad de la Cuenca del Plata, dijo que si no hay alcohol en las fiestas, ellos no van. Así lo resaltó ayer a “época” el director de esa dependencia, Daniel Umbert, presente en la reunión de padres en APICC.
El objetivo de la encuesta era determinar cuál es la influencia del etanol en los jóvenes, para lo cual el cuestionario de unas 40 preguntas se realizó a la salida e ingreso de los pubs y boliches de la ciudad en los últimos meses. Los datos preliminares indican que nueve de cada diez jóvenes ingieren alcohol, justificando que sin la bebida no existe diversión.
Rescatando la importancia de la convocatoria y el compromiso asumido por los más de 70 padres presentes en la primera reunión de ayer, Umbert resaltó: “Esto era un pedido que veníamos haciendo desde hace varios meses, porque no damos a basto y necesitamos del acompañamiento de los padres para poder hacerle frente a estas problemáticas”.
Según contó, “desde ahora, los padres van a salir a recorrer con nosotros la noche correntina y también van a participar de los controles de alcoholemia”.
El responsable del área que realiza los controles, destacó la importancia de que los tutores se sumen a la campaña de concientización “porque con la presencia de los padres, estamos seguros de que los chicos se achican y empiezan a respetar las normas”.
Domingo, 18 de enero de 2009