P. Libres, Goya, S. Tomé (13-3-15): Pero más allá de la molestia de los funcionarios, la preocupación es por la junta de firmas que empezó en Santo Tomé, sigue en Paso de los Libres, y ayer en Goya, un concejal del kirchnerismo molesto porque su facturación trepó hasta los $1.600, anunció que iniciará una campaña para la recolección de rúbricas en la segunda ciudad de la provincia. El segundo de la Dpec, Alfredo Aun, dejó entrever que en las facturaciones pudo haber errores. La iglesia en Santo Tomé acompañó reclamos. Para Vaz Torres estos reclamos obedecen a movidas políticas de la oposición.
El enojo y la molestia aumenta en el interior de la provincia a medida que las facturas del consumo energético llegan a los usuarios, en idéntica medida la administración provincial exhibió su enojo por los piquetes que se dieron el fin de semana en Santo Tomé.
La ciudad ubicada a orillas de la costa del río Uruguay, es la tierra natal del subinterventor de la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (Dpec), Alfredo Aun. El funcionario se molestó por la manifestación de los vecinos en las afueras de la Comuna el pasado domingo, a la altura del “Mejoral” en cercanías al ingreso de la ciudad. “Quizás en algunos casos haya habido errores”, dijo el funcionario sobre las nuevos importes en el ítem cargo fijo de las facturaciones.
La reacción de Aun está en sintonía con la del interventor de la empresa provincial encargada de la distribución del servicio, Enrique Vaz Torres, quien admitió el pasado martes que hay mucha más demanda de lo que declara la firma que conduce. Es decir que el déficit es incontrolable al menos por ahora.
Pero más allá de la molestia de los funcionarios, la preocupación es por la junta de firmas que empezó en Santo Tomé, sigue en Paso de los Libres, y ayer en Goya, un concejal del kirchnerismo molesto porque su facturación trepó hasta los $1.600, anunció que iniciará una campaña para la recolección de rúbricas en la segunda ciudad de la provincia. Las firmas son para adosarlas a pedidos de amparos judiciales. Se suma a esto, lo que centrales obreras como la Ctera, la CTA y movimientos sociales, intentarán llegar a la Secretaría de Energía de la Nación.
La otra alarma fue la presencia del obispo Santiago Faifer, durante el piquete en las afueras de la localidad. El acompañamiento de la Iglesia generó más preocupación en la administración provincial sobre el servicio energético en el Municipio donde además, para este lunes, las autoridades de la Dpec deben rubricar un convenio con el intendente local, Víctor Giraud (PJ), el Estado provincial pasará a la esfera del Municipio el servicio de alumbrado público. Justamente, este acuerdo es postergado desde hace dos semanas por el contexto que rodea a Santo Tomé, el colapso energético durante todo el verano y el mismo día del piquete hubo unas seis horas sin servicio por supuestas refacciones.
Como ocurrió en toda la provincia, la corrección en el cargo fijo disparó el costo en las facturaciones residenciales más bajas. Además, tienen un alto monto pero el consumo de esos usuarios sigue siendo el mismo. “Estamos indignados porque es mucho lo que nos aumentaron y ni siquiera tenemos luz”, expresó un ama de casa el domingo por la tarde mientras se desarrollaba el piquete que duró dos horas. A unos metros observaba y escuchaba monseñor Santiago, en una participación inédita en una protesta de esa naturaleza.
Viernes, 13 de marzo de 2015