Distintas áreas de Salud Pública intervienen en el tratamiento de los dos únicos pacientes confirmados con leishmaniasis cutánea en Corrientes durante 2009, a quienes se continuará el seguimiento durante los próximos dos años para descartar totalmente la enfermedad, a partir de la cicatrización de las heridas.

Se trata de un matrimonio compuesto por un joven que presenta una herida en la parte interior de una de sus piernas, y de una mujer embarazada que atraviesa aproximadamente la vigésimo segunda semana de gravidez.

En el caso del hombre, ante la detección de la enfermedad se había iniciado un abordaje medicamentoso que luego tuvo que ser suspendido por manifestársele problemas de origen coronario, por lo que los médicos le practicaron estudios para verificar si el rechazo al tratamiento estuvo relacionado con el tipo de droga o con su forma de administración.

Ayer, y con confirmación del director de Programas de Salud Pública, se aclaró que los problemas cardíacos del paciente no guardaron relación con los medicamentos que le fueron suministrados para leishmaniasis cutánea, por lo que se decidió dar continuidad al tratamiento, que se alternará ahora entre el Dispensario Dermatológico y el Instituto de Cardiología de Corrientes, con retorno al hogar.

Para el caso de la mujer, la decisión médica fue más compleja: la medicación antibiótica necesaria para afrontar el cuadro de leishmaniasis cutánea podría afectar seriamente al bebé en gestación, por lo que su diagnóstico será paliado luego del alumbramiento.

Especialistas afirman que no está confirmada la intervención de los medicamentos en el desarrollo normal del feto, pero que de todos modos no es prudente exponer al niño por nacer a efectos no comprobados científicamente.

De todos modos, la madre es sometida a controles rigurosos con el seguimiento personalizado que le ofrece la Dirección de Maternidad e Infancia provincial, con intervención directa de su titular, la doctora Elba Mirta Morales.

“El criterio de curación de la enfermedad es la cicatrización”, afirmó sobre la leishmaniasis cutánea la directora del Dispensario Dermatológico, la doctora Lisa Odriozola, quien además explicó que una vez curadas las lesiones, los controles deben reiterarse a los tres y seis meses, al año y luego, durante los dos primeros años, cada seis meses”.

Miércoles, 11 de febrero de 2009