Viernes, 4 de Octubre de 2024
  
04/10/2024 10:26:32
Política
Ricardo muestra el tenor de violencia verbal que impondrá a la campaña
Compartir en Facebook    Compartir este artículo en Twitter    Compartir este artículo en WhatsApp    Imprimir esta nota
Miércoles, 9 de noviembre de 2016

Corrientes (9-11-16): Consciente que será el último en irse y apagar la luz, Horacio Ricardo Colombi empezó a los chicotazos con la violencia verbal anticipando lo que será la campaña política para consagrar a su sucesor dentro de un año. En una suerte de imponer aquello de "haz lo que yo digo, no lo que yo hago" Ricardo habla de “honrar las deudas”, sin mencionar las cuentas pendientes con la justicia que tienen tanto él, Horacio Ricardo Colombi, como su primo antecesor Arturo Alejandro Colombi. Seguramente antes de irse pagarán sus deudas, no sea cosa de andar manchando el apellido gratuitamente. Dejando siempre implícito de que quien no haga lo que él ordena se deberá atener a las consecuencias, como ya de hecho lo advirtió su ladero Sergio Flinta al manifestar que “Si el intendente quiere enfrentar al gobierno, va a tener consecuencias”, a buen entendedor pocas palabras sirven.

Asumiendo un verborrágico personaje, renunciando a su parquedad habitual, aprovechó para tirarle a un imaginario muñeco de parque y despachó frases como estas:

“Cómo creerles si son parte de un sistema corrupto que generó deudas”.

“No quieren pagar las deudas de los órganos del Estado, como la obra social o el alumbrado, y quieren gobernar así una provincia que tanto nos costó ponerla de pie”.

“Hay que cambiar el pensamiento de que ‘no importa el futuro, total no voy a estar, así que me puedo endeudar’. No es así”.

Seguramente frases dirigidas a potenciales rivales de turno.

A propósito de deudas y aquello que “no voy a estar para pagarlas”; olvida Ricardo Colombi que es socio incondicional del Gobierno de Mauricio Macri que en solo nueve meses de gestión ya se endeudó por más de 54 mil millones de pesos. Argentina se transformó en el país emergente que más deuda contrajo en el mundo.

Es la incoherencia la principal compañera del gobernador correntino, quien apela a la descalificación o al insulto, como “si el muerto se asustara del degollado”.

No solo hay que hablar de las deudas económicas que son fundamentales cumplirlas, para no trabar el buen funcionamiento de los roles del estado.

También está la otra deuda, mucho más lacerante que la económica, porque es la que sufre la gente a cada rato. Es la deuda social, en una provincia con los peores índices de alfabetización, desnutrición infantil y carencias en el accionar social.

La deuda social de Corrientes es muy grande. Como grande fueron los cuatro períodos consecutivos que tuvieron los primos Colombi (Ricardo 2001-2005, 2009-2013 y 2013-2017) (Arturo 2005-2009). Casi veinte años de Colombi con los sueldos públicos más bajos de todo el país.

Deudas institucionales, con ultra presupuestos provinciales por miles de millones de pesos, aprobados en la Legislatura, pero jamás rendidos públicamente en las famosas Cuentas de Inversión que se aprobaban a libro cerrado; por continuidad del ejercicio o simplemente porque eran cajoneadas las rendiciones en cualquier escritorio legislativo. Así de simple.

También están las deudas con la justicia. Como decía el Corso: Con las manos limpias, mostrando la diestra y la siniestra con todos los dedos abiertos, sin esconder nada.

Para recordar simplemente algunas causas que duermen el sueño de los injustos, porque siempre están las espadas políticas de la justicia capaces de someter a cualquiera que intente ventilar algo comprometedor. A saber.

Está latente una causa judicial sobre Ricardo Colombi por la adquisición de una vivienda; según aseguran “donada” por un testaferro, siendo funcionario público el donatario. Es la fastuosa casona en la esquina de Perú y Poncho Verde. Se dice que es una vergüenza y un escándalo judicial.

Además, existiría otra causa judicial de otra casa ubicada en el Barrio Camba Cuá, también “donada” bajo las mismas condiciones. Se nota que es un buen gobernador y una excelente persona, a quien algunos se desesperan por donarle casas. No es cualquier cosa.

Para el primo Arturo, no es menor el detalle de la causa publicidad, también frenada en la justicia, después de tanta orgía publicitaria con los dineros públicos que retuvo tras las rejas a varios de sus funcionarios e incluso se llevó la vida del joven Hernán González Moreno, en circunstancias jamás aclarada.

De toda esta clase de deuda se olvida Horacio Ricardo Colombi, quien prefiere los insultos y la violencia verbal, con lo peligroso que es a veces ser lenguaraz, porque habrá que tener lomo después para aguantar. Y eso que la campaña recién empieza.


Miércoles, 9 de noviembre de 2016

Copyright ©2008
Surcorrentino.com.ar
Todos los derechos reservados

DESARROLADO POR:
www.chamigonet.com.ar