Belo Horizonte (11-11-16): En una noche para el olvido la selección nacional fue vapuleada por Brasil, una verdadera vergüenza el seleccionado que no supo generar más de una sola jugada de gol concreta. Los locales encontraron espacios luego del primer tanto -un golazo de Coutinho-, y bailaron a la selección en el Estadio Mineirao de Belo Horizonte con goles de Neymar y Paulinho. El equipo de Bauza lució perdido y sin fútbol ni respuestas ante Brasil, que es el líder de las Eliminatorias y dejó a Argentina en el séptimo lugar, cada vez más cerca la frustración de no estar en Rusia





Brasil goleó a Argentina en Belo Horizonte y lo complicó en el camino a Rusia 2018 -ver la tabla de posiciones de las Eliminatorias-, pese a que si vence a Colombia el martes en San Juan estaría al menos, sin depender de resultados en puestos de repechaje.

Hay cierta verdad en que hasta el golazo de Coutinho que abrió el partido por el hueco que dejó Mascherano tras su salida en falso en la mitad de cancha, Argentina tenía la pelota y hasta había dispuesto de una buena ocasión en los pies de Enzo Pérez tras un combinación efectiva. Una solo situación, el equipo no hacía daño.

También hubo una volea de Biglia que Allison desvió al córner y dos tiros libres al borde del área que Messi no pudo pasar la barrera. No mucho más.

A partir de allí, la selección de Tité cedió aún más terreno y por ende la pelota a los pies de los nuestros. Pero seguíamos sin generar espacios para Messi, Di María como hace varios partidos no rompe por izquierda e Higuaín no dispuso siquiera de la chance de pelear una pelota en el área.

Y llegó el segundo mazazo cerca del cierre del primer tiempo por otro desacople defensivo por el sector de Zabaleta. Brasil encontró espacios tras un lateral de Marcelo en su campo pero en tres toques, la ´Verdeamarelha´ puso mano a mano a Neymar ante Romero.

Lo dicho: hay cierta verdad en que hasta el golazo de Coutinho que abrió el partido Argentina estaba bien parado, como dijeron Bauza, Messi y Mascherano con gesto adusto en zona de vestuarios.

Esa es la única mirada del vaso medio lleno tras una jornada negra que hunde a la selección en una crisis futbolística inédita desde la decepcionante derrota de la final de la Copa América 2007 en Venezuela ante el mismo rival y por el mismo resultado.

En la copa vacía hay un montón de preguntas que llenan el cristal, ese que se rompe al mirar fijo las imágenes, algunos rendimientos individuales dentro del campo de juego y otras tantas decisiones del otro lado de la línea de cal.

Entonces surgen las preguntas: ¿por qué sale de la cancha Enzo Pérez y Bauza se regala como admitió, con Messi delante de Zabaleta por el ingreso de Agüero? ¿Por qué Bauza hizo reingresar a Zabaleta, que sufre en la marca y no pesa en ataque ni en ocupar espacios si con Mercado la selección había encontrado equilibrio, el bendito equilibrio?

Y más: ¿Por qué sigue en cancha un jugador como Di María, otrora as de bastos en Real Madrid con CR7 y en la selección con Messi?

La goleada, calificada como baile o papelón según la mirada del hincha y lector, duele más aún porque sucedió cuando este equipo y estos nombres, debían demostrar carácter ante el rival de siempre.

La frase de terapia o pared reza: cómo espera uno que las cosas cambien si hace siempre lo mismo. Bauza en su debut, arriesgó con nuevos nombres sobre todo con la inclusión de Dybala y Messi por derecha.

Pero reculó y volvió a citar a nombres que no muestran otra actitud ni ánimo de refundar su fútbol con la camiseta argentina. Y lo que no se entiende es que siguen en cancha aún no pesando en el juego. El caso de Di María y Pérez de este jueves es notable.

"Tocamos fondo y todavía estamos vivos", dijo Messi. Y graficó el momento inédito que atraviesa la selección. En Bauza y sus gestos con decisiones, hacia adentro del vestuario y en la cancha, pero sobre todo en los jugadores que salgan a dar la cara ante Colombia el martes, está demostrar que este equipo puede dejar atrás esta goleada -baile o papelón-, y refundarse como equipo.

Formaciones:

Brasil: Alisson; Dani Alves, Miranda, Marquinhos y Marcelo; Fernandihno, Paulinho y Renato Augusto; Gabriel Jesús, Neymar y Coutinho. DT: Tite

Argentina: Sergio Romero; Pablo Zabaleta, Nicolás Otamendi, Ramiro Funes Mori y Emmanuel Mas; Enzo Pérez, Javier Mascherano, Lucas Biglia y Ángel Di María; Lionel Messi; y Gonzalo Higuaín. DT: Edgardo Bauza.

Árbitro: Julio Bascuñán (Chile)
Estadio: Mineirao (Belo Horizonte)


Viernes, 11 de noviembre de 2016