Corrientes (1-10-17): Para muchos, la elección se decidirá en la recta final. Esta última semana es fundamental. Camau tiene a su favor el largo historial de competencias. El Gobierno intenta demostrar apoyo nacional e instalar que, aun con prácticas nones sanctas, derrama ingentes recursos para torcer la voluntad popular. Muchas de las acciones proseli tistas fueron noticia nacional. En los hechos, trata que la proscripción del Intendente de Goya le aporte los votos que le faltan. Camau, con la mirada fija en el disco, está pronto a sacar la fusta bajo el brazo.

Al radicalismo le cuesta que crean en un cambio después de 18 años de promesas incumplidas y falta de realizaciones. Corrientes contrasta frente a provincias vecinas que han tenido un despegue notorio. La marca Cambiemos cuesta imponerse en la Provincia con el modelo Colombi. No a la reforma política, no al voto electrónico, proscripciones, ayuda clientelar y otras yerbas ponen en crisis el discurso del Gobierno nacional. Los medios nacionales le han hecho eco de la campaña de Corrientes. El domingo estará la vista del país puesta sobre la Provincia.

Los resultados son importantes para la política nacional, de cara al tiempo que se viene. El Presidente haría pública su decisión de ir por un nuevo período antes de la conclusión de 2017; en tanto que Juan Manuel Urtubey lo hará el lunes 23. El 10 diciembre jurarán por seis años dos ex presidentes como senadores de la Nación. Cristina, que se incorpora, y Carlos Menem, que será reelecto por amplia mayoría del pueblo riojano.
Camau vs Valdés

La recta final de la carrera para la Gobernación se desarrolla por estas horas. Tensiones y pasiones propias de la política. Campañas sucias y clientelismo político están a la hora del día. A ello se suma en este período electoral la judicialización de la política a la que el Gobierno ha apelado para revertir un resultado que desde el principio se mostró desfavorable. Los correntinos apuestan a un cambio de orientación política y hoy quien capitaliza ese sentimiento mayoritario es el principal candidato de oposición, Camau Espínola.

El Gobierno lo sabe. Por eso las ofensivas sobre Perugorría e Itatí. Por eso las avanzadas judiciales sobre algunos intendentes del PJ. Por eso las proscripciones, tan mal vistas por la gente en cuanto significan subordinar el derecho de elegir y ser elegido en un marco de libertad ausente.
Agotadas todas las instancias, Colombi juega a que la figura de Macri sea capaz de arrimar los votos que faltan. Como nunca antes, el Gobierno apuesta a nacionalizar el escenario electoral.

Habla una y otra vez de alineamiento que muchos de los correntinos ven como sometimiento. Prueba de ello la han percibido con la firma del decreto que perjudica a los jubilados. Ese decreto fue tenido en reserva varios veces hasta que salió a la luz y hasta hoy no se conocen algunas cláusulas secretas de un convenio que el propio Jefe de Gabinete explicó que no viene siendo cumplido por Colombi y por ello se suspendieron las remesas de dinero que estaban previstas.

La revelación de Marcos Peña, en ocasión de su visita al Senado de la Nación y en el marco de informe periódico que está obligado a dar a los legisladores, remarcó que Corrientes ya había recibido un anticipo de 163.000.000 de pesos y, aunque debía seguir recibiendo nuevas remesas, se suspendieron por el incumplimiento de la Provincia de obligaciones asumidas.

El interrogante es: ¿a qué se comprometió Colombi con el Gobierno nacional?

La información corrió como reguero de pólvora en la Provincia. Ricardo levantó el pie del acelerador. Reiteró una vez más que no transferiría la caja provincial a la órbita de la Nación ¿Hay que creerle? La palabra del Gobierno está devaluada desde hace tiempo. Dijo una y otra vez que no buscaría la reforma y terminó buscándola y fracasando. Dijo que, sí o sí, se votaría antes para legisladores y no fue así. Dijo ocho veces que iría de candidato a Mercedes y terminó asegurándose una banca en el Senado.
De "Tato" renegó una y mil veces y no dudó a la hora de llegar a la casa de la calle Mendoza para compartir un asado y luego andar tras él para lograr sumarlo a la alianza. Lo propio pasó con Fabián Ríos. Acuerdos, desacuerdos, nuevos acuerdos y, como una constante, un mal final. Los vecinos de Capital y los empleados del Municipio siguen siendo rehenes de esta pelea. En el medio, un guiso que hizo el propio Ríos y a partir del cual se creía que todo el pasado quedaba superado.

Con Gustavo Canteros pasó lo mismo. Estuvo en el purgatorio largo tiempo, con la manguera doblada y en penitencia hasta que lo fue a rescatar para poner en carrera a Gustavo Valdés. Esto sólo para citar algunos ejemplos de las idas y vueltas que caracterizan al número uno del Gobierno que se va. Un hombre carente de ideologías, que resuelve coyunturalmente y con sentido práctico las cuestiones más difíciles, como fue en su momento la relación con el kirchnerismo que lo alejó de la UCR nacional. Fue un radical K a carta cabal durante largo tiempo, al cabo del cual, cuando los vientos cambiaron, terminó desconociéndolos y haciendo un anti kirchnerismo exacerbado, con poca autoridad moral.

MACRI, CON EL LOMO DURO ESPERA PASAR EL 8

A Mauricio nunca le cerró su relación con Colombi. No es un secreto. Aun así, a corto tiempo hay una necesidad común: pasar estas elecciones. Para el macrismo es importante mostrar un triunfo en Corrientes que lo ayude en las elecciones nacionales de medio tiempo.

Un resultado positivo lo acercaría al 40 por ciento a escala nacional y aseguraría una mejor performance en otras provincias por el efecto residual y de contagio en las expectativas.

De ahí el repentino interés del poder central sobre Corrientes. No es ni por la Provincia, ni menos por el radicalismo o por el propio Colombi, o Valdés.
El resultado de Corrientes sería una buena noticia para este turno electoral. El que ganase en Corrientes sería Macri. Esa tapa de los diarios del lunes 9 es lo que en este momento busca con lógica política el Gobierno nacional.

LOS COSTOS

Al macrismo no le agrada que lo emparenten con las burdas prácticas que se aplican en la Provincia. Desde las alpargatas, la política clientelar, la no reforma política y voto electrónico, el tener que sostener, hasta pasadas las elecciones, el pliego de un candidato a juez Federal al que se involucró con el narcotráfico, lo sucedido en Goya y otras cuestiones erizan la piel de la primera línea del Gobierno central.

De ahí el debate sobre el grado de participación en la campaña electoral. Los hechos sucedidos en Corrientes fueron y son noticia nacional y quitan credibilidad al Gobierno nacional. De hecho, molestan y mucho a Macri, quien tiene en claro que se sentiría más a gusto cerca de Camau, por su perfil más acorde a lo que el Presidente piensa del 22 de octubre en adelante.

Pero lo primero es lo primero y hasta el domingo que viene, Macri y Colombi tirarán juntos. Luego se verá. En verdad, la cuestión es más profunda. El análisis del PRO para el tiempo que se viene es otro. Los radicales seguirán perdiendo espacios de poder. De hecho, hoy no son parte en la mesa chica del poder al punto que muchas veces incide más Lilita Carrió que toda la UCR junta, incidencia relativa porque tampoco participa de las decisiones trascendentes.

Muestra de que la relación no es buena entre el PRO y la UCR lo constituye el portazo del presidente del interbloque en el Senado, Ángel Rozas y las duras declaraciones de Ricardo Alfonsín.

LA POLÍTICA CLIENTELAR

El Gobierno está poniendo recursos para las elecciones del domingo, pero quizás no en la medida en que el propio gobierno quiere mostrar. La difusión de algunos videos mostrando la bajada de mercadería, chapas o la misma entrega de alpargatas se hacen en vehículos oficiales y a la luz del día, con notoria impudicia.

Los que saben aseguran que son montajes armados desde las propias oficinas gubernamentales. Apuntan a instalar como que se viene la "Armada Real". Apuestan a que la oposición se sienta avasallada.

En la realidad, las cosas no son como parecen o quieren mostrar y no pocas son las quejas de los punteros radicales por la falta de atención. Hay reclamos por la discriminación y porque la ayuda es monopolizada por algunos dirigentes que se llevan la mejor parte y los medios no llegan donde deberían llegar.

A veces, cuando hay, se pierde la mística y la pelea pasa a ser por quién se queda con la mejor parte; en cambio, cuando no hay tanto crece la mística, el pelear por las convicciones en el cuerpo a cuerpo y en el boca a boca, que es la esencia de la política en términos de convencimiento sano.

CAMAU NUNCA PERDIÓ LA PUNTA

Si pensamos que esta se asemeja a una carrera en el hipódromo de Palermo, con un clásico de 3.000, podríamos decir que los caballos están pasando la marca de los 2.300. Faltan 700. Faltan 7 días.

Se está jugando el resultado. El porcentaje de indecisos es mucho más alto del que dicen, porque al hablar de indecisos hay que tener en cuenta el voto consolidado o el núcleo duro de ambos frentes. Los demás votos son volátiles y pueden, hasta el domingo mismo de las elecciones, cambiar, tallarines o asado de por medio del fin de semana.

El Gobierno sabe que está en dificultades. Confía quizás en demasía que Goya pueda salvarle la ropa.

Lo cierto es que hay ocho encuestadoras trabajando. Los oficialistas hablan de cuatro sobre las que tendría control directo y, aunque arriesgan diferencias y resultados halagüeños, a la hora de la verdad nadie quiere ponerle la firma ni menos dar la cara con números en mano.

CORRIENTES CEMENTERIO DE ENCUESTADORAS

La Provincia es mirada de manera especial en el mundo de los consultores y encuestadores. Muchos e importantes son los que se han equivocado, y feo, arriesgando o vaticinando resultados que no se cumplieron. Todo empezó allá, en las duras disputas del ‘91, colegios electorales de por medio.

Julio Aurelio fue la primera víctima en Corrientes. Después fueron muchos los que se equivocaron.

La última elección de Capital fue patética. Se hablaba de un resultado imposible de verificarse. El error aparece incomprensible porque eran dos candidatos fuertes y una elección comunal, sin la distorsión que generan por atracción las ofertas simultáneas en lo provincial o nacional.

Tampoco incidían la multiplicidad de colectoras que hay ahora. Aun así, se equivocaron. Con estos antecedentes, los profesionales extreman la cautela como nunca antes, porque además están en la vidriera nacional.

Si algo deben tener los que a esto se dedican es el capital de la credibilidad. EL LIBERTADOR ofreció publicar las encuestas de quienes se hagan cargo de ellas. No tuvo respuesta, lo cual es una pauta muy clara de la prudencia que hoy por hoy tienen y de que la elección, se diga lo que se diga, tiene final abierto.

Los que aseguran que Camau perdió la punta no abonan sus dichos con nada que desmienta. Todo lo contrario. Algunos encuestadores ligados entrañablemente a distintos sectores del oficialismo admitieron lo tardío de la candidatura de Valdés y la dificultad en instalarse.

CAMAU, CON LA VENTAJA DE SER UN COMPETIDOR NATO

En su dilatada carrera deportiva, Camau supo de triunfos y fracasos. Supo lo que es perder y volver a comenzar. Supo del entrenamiento y la disciplina que debe tener quien quiere algo.

Y esto, aplicado a la política, es lo que le permitió en 2009, corriendo de atrás, lograr un triunfo inesperado en la última semana frente a un candidato de fuste que era claramente el favorito: el caso de Eduardo Tassano, quien si bien perdió entonces tuvo su desquite ocho años después.

De ahí la enorme importancia de estas horas para la definición del resultado, con una elección que tiene la mira puesta en Goya y en Capital. Goya es la gran apuesta que tiene el radicalismo. Si bien consideran difícil ganar, creen que es posible achicar notoriamente la brecha inicial que mostraba un muy claro triunfo de Camau sobre Valdés.

De hecho, Colombi festejó la decisión de los intendentes de Mercedes y de Goya de votar con las provinciales. Fue un regalo inesperado que le permitió redefinir la estrategia y alentar esperanzas para el resultado de las provinciales.

A partir de ahí controló a mano firme la conformación de la lista de legisladores, dando a cada banca un sentido vinculado a su propio interés. Téngase en cuenta que hay sólo dos bancas de diputados para el radicalismo sobre diez, lo cual es prueba de que los números no le cierran.

Porque no le cierran es que apuntó a sacar de la cancha a dos de los intendentes más taquilleros del PJ, un costo que sólo se paga cuando el agua llega al cuello.

Oscar "Cacho" Piñón, el jefe comunal de Ituzaingó mostró reflejos, quizás producto de su larga experiencia política. De una llevó las elecciones al 22, unificándolas con las nacionales.

Una decisión que inexplicablemente no fue acompañada por Víctor Cemborain ni Gerardo Bassi, que además se sometieron a la Justicia provincial en desmedro de la participación de la Junta Electoral Nacional que tiene a cargo las elecciones de candidaturas nacionales como son las del 22, en que se renueva la mitad de la Cámara de Diputados de la Nación y un tercio del Senado.

Con este escenario llegamos a la última columna previa al día de las elecciones. Lo importante es que, gane quien gane en Corrientes, se recupere la capacidad de diálogo, así como que el oficialismo y la oposición entiendan que sólo juntos pueden sacar la Provincia adelante.

Un desafío común tienen cual es la provincialización de Yacyretá. La senadora, Carolina Martínez Llano anticipó que correntinos y misioneros respaldarán esta iniciativa; una prueba de fuego para el radicalismo de Corrientes, que deberá demostrar que alineamiento no es sometimiento.

Hay que esperar que a la hora de votar prime el interés de Corrientes. Otro caso es la defensa de la caja de jubilados ¿Hasta dónde resistirá Colombi las exigencias de la Nación? Y un tercer caso y no menos importante es qué hará Corrientes si el Gobierno nacional no toma con responsabilidad el caso de la construcción de los puentes caídos.

En tanto, en la Legislatura, la llamada ley de leyes duerme el sueño de los justos. El Gobierno, que tiene número suficiente en Diputados prefiere gobernar sin presupuesto.

Domingo, 1 de octubre de 2017