Investigadores en materia ambiental y de salud sostienen que la epidemia de dengue que azota al país es la mayor en de la historia, por lo tanto se llama a la población a tener en cuenta una serie de medidas preventivas para evitar el avance de la enfermedad, entre las que se resaltan la necesidad de eliminar los criaderos del mosquito transmisor.
El dengue se transmite por la picadura del mosquito Aedes aegypti, que se propaga durante la temporada lluviosa, en agua limpia acumulada en recipientes y basura domésticos y peri-domésticos, donde la hembra pone sus huevos.
El nicho ecológico que explotan las larvas de estos mosquitos son recipientes con pequeñas cantidades de agua sobre todo en lugares sombreados: por ejemplo jarras, floreros, baldes, platos de macetas y otros objetos conteniendo agua en jardines, patios y descampados.
Otros sitios donde mejor pueden reproducirse son aquellos con agua estancada y limpia, principalmente recipientes y objetos abandonados que juntan agua de lluvia o de riego, como botellas y frascos de vidrio o de plástico, tanques de agua sin tapa, neumáticos viejos al aire libre o sobre los techos, y los floreros de los cementerios.
Lo fundamental a tener en cuenta es que esta especie de mosquitos son de hábitos domésticos y ponen sus huevos en la superficie del agua limpia y los huevos producen larvas y de ellas eclosionan los mosquitos adultos en un ciclo se completa en el agua entre 7 y 13 días, dependiendo de la temperatura ambiente.
Aunque el vector puede alimentarse en cualquier momento, suele picar con más frecuencia al amanecer y al atardecer y su picadura, incluso a través de ropa fina como calcetines, es muy molesta, produciéndose en las horas diurnas en las que muchas de las especies autóctonas no suelen picar; pero se debe tener en cuenta que el mosquito puede picar a cualquier hora del día.
Es necesario usar repelente y consultar al médico cuando se registren los siguientes síntomas: fiebre alta, dolor de cabeza y espalda, vómitos y erupciones cutáneas.
Una segunda picadura, que transmite una cepa distinta, puede derivar en dengue hemorrágico y para no alarmarse es necesario tener en claro que el dengue se cura si se atiende a tiempo y se reposa, pero puede ser mortal en su variante hemorrágica.
Entonces, para combatir el dengue hay que destruir los criaderos domiciliarios y peridomiciliarios del mosquito transmisor, es decir, iniciar de forma urgente una limpieza profunda adentro de las casas y en los patios.
Cabe aclarar que las campañas de fumigación solo es un paliativo porque mientras haya criaderos de mosquitos en los patios, en los techos, en las veredas, en baldíos, gomerías, cementerios y en lugares abandonados cerca de las casas, habrá dengue.
Agencia Corrientes
Viernes, 3 de abril de 2009