El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, manifestó su oposición el paredón que el municipio está levantando en el límite con el distrito de San Fernando para combatir el delito y afirmó que el intendente Posse tendrá que "repensar" esa idea. En tanto, Sergio Massa dijo: “Lo que tenemos que hacer es abrir calles, no levantar paredes”.
El gobernador bonaerense Daniel Scioli expresó hoy su oposición a la construcción de un muro de 250 metros de largo que la Municipalidad de San Isidro está levantando desde ayer en el límite de San Fernando para proteger a sus vecinos de hechos delictivos y le pidió al intendente Gustavo Posse "repensar" ese proyecto.
El mandatario provincial aseguró que la medida adoptada por el intendente sanisidrense "es un error" y afirmó que el jefe comunal tendrá que "repensar" esa idea porque "la solución (a la inseguridad) no puede ser cortarnos cada uno por su lado".
En tanto, el intendente de San Fernando, Osvaldo Amieiro, presentó hoy un recurso de amparo para detener la construcción del muro "planteando ante la Justicia el derecho de la gente, de los vecinos, a la libre circulación" y se mostró "sorprendido por esta actuación inconsulta del intendente Posse.
Esta mañana, los vecinos protagonizaron algunos incidentes cuando pretendieron romper parte de esa valla de hormigón y arrojaron piedras contra los policías que custodian el lugar.
El muro de cemento y rejas que está levantando desde ayer la Municipalidad de San Isidro para combatir la inseguridad está ubicado sobre a avenida Uruguay y Guatemala, en el límite con el partido de San Fernando, y separa a vecinos de La Horqueta, con otros del barrio Villa Jardín.
Los vecinos de San Fernando se mostraron indignados por el muro, al que consideraron discriminatorio, ya que les impide el paso hacia el otro lado de la avenida Uruguay y tienen que caminar más de 400 metros para poder cruzar.
"Las familias (de La Horqueta) están sobreexpuestas porque la avenida Uruguay es un canal de acceso muy fácil hacia la autopista Panamericana y hacia una zona de villas de emergencia muy peligrosas", dijo Posse en declaraciones a radio Continental, en las que hacía referencias a 33 familias de ese barrio exclusivo que solicitaron medidas para combatir la inseguridad.
Scioli expresó esta mañana a radio Provincia que habló con el intendente Amieiro para expresarle su preocupación.
"Es momento de movilizar energías para unir, no dividir. El mensaje, en esta época de Pascuas, debe ser de unión entre hermanos, y la inseguridad se la combate con más inclusión y no con discriminación", remarcó.
"Yo trabajo todos los días para integrar una provincia y mejorar la seguridad ciudadana. Si cada uno se quiere salvar solo, no se salva nadie. El país es el mismo para todos, la solución no puede ser cortarnos cada uno por su lado", afirmó.
En tanto, Amieiro afirmó a Télam que ayer estuvo junto a Posse en la firma de un convenio y no le comentó nada sobre la construcción del muro.
"Nunca estuvo en la agenda de los problemas de ambos distritos la construcción de un muro. Esto está ligado a un reclamo de seguridad que plantea un sector de La Horqueta", dijo.
"Creo que lo importante sería derribar muros, no crearlos.
Nosotros trabajamos para que no haya escuelas de delincuentes, escuelas de narcos, escuelas para la venta de ’Paco’, estamos tirando pasillos abajo, estamos tratando de eliminar las villas y trasladando a los vecinos a barrios más seguros", agregó.
Finalmente, Amieiro expresó que el muro "le ofrece protección para 33 familias en contra de sectores que no tienen posibilidades de defenderse. Son decisiones antojadizas porque Villa Jardín no es un barrio que está en el mapa del delito como zona caliente".
Miércoles, 8 de abril de 2009