El secretario de la organización Médicos del Mundo, Carlos Tcholakian, afirmó hoy que el dengue está en el país “desde fines de la década del 90”, y sostuvo que “esta información no se ha dado a conocer como correspondía por grandes mezquindades políticas”.
Según Tcholakian, “en el país hay aproximadamente treinta mil infectados, pero las cifras oficiales dan la mitad. Estamos frente a una epidemia”.
“Ya tenemos dos casos autóctonos en la ciudad de Buenos Aires, y tres casos en la provincia de Buenos Aires. El vector ya afloró en esta zona. Esto ya es grave. Roguemos que estas altas temperaturas no sigan, que bajen abruptamente”, señaló a radio Continental.
El especialista aseveró que “desde hace mucho tiempo tenemos dengue en nuestro país, desde fines de la década del 90, y esta información no se ha dado a conocer como correspondía por grandes mezquindades políticas”.
“Esto afectó a que (el dengue) se propalara y hoy nos encontremos en esta situación”, indicó.
Tcholakian dijo que el frío “eso va a alejar la posibilidad de que haya un brote muy serio en la ciudad de Buenos Aires”, pero destacó que las larvas “quedan hibernando. Esto le da tiempo al gobierno de la Ciudad para que tome medidas pertinentes para evitar su afloramiento”.
Asimismo, remarcó que “hay un problema ambiental muy serio: los problemas sanitarios, de acceso al agua potable, la polución, el medio ambiente, las viviendas precarias, todo hace que estos sectores sean elementos de cultivo para el vector”.
“Hablamos de una enfermedad y una epidemia en la que hay sectores marginales, pobres. (El dengue) es propio de los países con desigualdad social, de la pobreza”, prosiguió.
El médico consideró que “tenemos que asumir que estamos ante una epidemia, crear una emergencia nacional con fondos suficientes para la ubicación del vector. Ver las zonas donde hay posible surgimiento de los brotes y actuar rápidamente. Si es necesario, pedir ayuda internacional”.
“Este tema es muy grave, y está íntimamente ligado al cambio climático mundial. Esto brota acá en la Argentina, es parte de un problema general, y se resuelve con políticas activas y una fuerte presencia del Estado”, añadió.
Tcholakian llegó a advertir que en la propagación del dengue intervienen hasta “los distintos elementos que se utilizan para la soja, como herbicidas e insecticidas, que son altamente contaminantes. Han hecho variar el clima y el ambiente, y han ayudado, no digo que sean el único caso, al surgimiento del dengue”.
Lunes, 13 de abril de 2009