Entre los múltiples efectos que puede traer una crisis económica en una persona se encuentran no sólo las materiales, sino también las físicas: aumentó la cantidad de consultas a traumatólogos y kinesiólogos por contracturas. Hasta alumnos de primaria empiezan a sentirlas.

Una contractura no es un simple dolor muscular, sino un dolor punzante, constante e involuntario producido por la contracción de un músculo, principalmente en la zona del cuello, espalda, hombros y cintura, tal copmo explicó el kinesiólogo Sergio Maslo al diario Clarín.

Al parecer, otro de los efectos adversos de la crisis es que aumentaron los niveles de estrés -y por lo tanto de contracturas-, sobretodo en mujeres de entre 35 y 45 años. A partir de los 50 años, habría más casos tanto en hombres como en mujeres, e incluso se habrían registrado casos en chicos que cursan los últimos grados de la primaria, según publicó el diario.

Las causas del estrés a los 12 o 14 años se deben en parte a la cantidad de horas que los chicos pasan frente a la computadora y en parte por la "agresividad que se vive en las escuelas", tal como sostuvo Liliana Geijo, miembro de la Asociación de Kinesiología y docente de la UBA.

Pero los más afectados serían los pacientes que trabajan en oficinas, con la mirada fija en un monitor, o los que tienen una vida sedentaria . Las indicaciones para una vida más sana irían "a contramano" del ritmo de vida actual, como explicó al diario Pablo Rivas, presidente de la Asociación Argentina de Terapia Física.

Rivas se refirió al "gran aumento de demanda, competitividad y compromisos económicos" como las causantes que "atentan contra la vida al aire libre, con la posibilidad de hacer deporte, de llevar una buena dieta y de tener sosiego" que recomiendan psicólogos, nutricionistas y kinesiólogos.

Sábado, 18 de abril de 2009