Los operarios de la Dirección de Energía ratificaron hoy su plan de lucha y anunciaron el inicio de un paro por tiempo indeterminado a partir del próximo miércoles tras rechazar anoche un ofrecimiento salarial de 300 pesos, al que el sindicato consideró inaplicable. “Quieren sujetar el aumento a una recaudación imposible”, dijeron sindicalistas, en tanto el gobierno criticó el recrudecimiento de las protestas.

Delegados del Sindicato de Luz y Fuerza se reunieron ayer con el interventor de la empresa distribuidora de energía eléctrica, Julio Espínola, en una de sus dependencias capitalinas, pero sin embargo no llegaron a un acuerdo.


Al salir del encuentro los trabajadores informaron que el funcionario les ofreció 200 pesos de recomposición salarial, propuesta que luego ascendió a 300, pero que sujetó al incremento de la recaudación de la Dirección de Energía.

Los trabajadores, que exigen un incremento de 1000 pesos, sin embargo, calificaron de inaplicable la propuesta dado que el piso de recaudación que Espínola estableció, según narraron a Momarandu.com, es muy difícil de alcanzar, y aún más de mantener.

Oscar Ocampo, miembro del Sindicato de Luz y Fuerza señaló que sobresabidos los problemas para incrementar su recaudación de la Dpec, los trabajadores no pueden aceptar una oferta como esa, la que a la vez validó diciendo: “el reclamo es histórico y debió haberse subsanado antes”.

Hoy los trabajadores reeditan un paro, esta vez de 24 horas en las dependencias capitalinas de la empresa y en varias delegaciones del interior. La protesta comenzó esta semana con dos horas de huelga, pero se incrementó a razón de una hora por día al no hallar punto de acuerdo el sindicato y el gobierno.

Pero los trabajadores también anunciaron el recrudecimiento de las medidas de fuerza: el próximo miércoles piensan iniciar una huelga por tiempo indeterminado. La estrategia sin embargo aún está sujeta a futuras reuniones.

Los trabajadores a la vez coincidieron este viernes en repudiar el dictamen de ilegalidad sobre las medidas de fuerza expedido por la Subsecretaría de Trabajo días atrás a pedido de la Dpec. En tanto el interventor Espínola calificó hoy de “vandálicas” a las protestas.

El funcionario censuró que los delegados gremiales hayan rechazado la oferta salarial propuesta, dijo que se “filtran” en esa decisión “intereses políticos contra el gobierno” y repudió un corte de luz que los trabajadores habrían inducido en una dependencia capitalina de la distribuidora.

Domingo, 10 de mayo de 2009