Pancho Dotto supo ser uno de los referentes más top del mundo de la moda. En otros tiempos, tuvo que el monopolio de las bellezas argentinas con las que hacía bandera en todo el mundo, como Pampita Ardohain y Dolores Barreiro.
Durante más de una década hizo ostentación de glamour desde las playas de Punta del Este y se jactó de tener a las modelos más caras.
Sin embargo, Dotto no está pasando un buen momento empresarial. Atormentado por una causa penal por evasión tributaria (en el juzgado número uno de Javier López Biscayart) y por la crisis económica mundial, el representante tuvo que tomar la drástica decisión de mudar su agencia de la calle Arenales a su casa en San Fernando, por problemas financieros.
Miércoles, 27 de mayo de 2009