Bs. As. (8-4-20): El empresario Alfredo Coto está en la mira desde hace varios días, luego que el municipio de La Matanza le clausuró por unas horas el supermercado de Ramos Mejía el pasado viernes por falta de higiene. El supermercadista salió durísimo contra Fernando Espinoza al que consideró que “está fuera de sus cabales” y a continuación planteó sus dudas contra el DNU del presidente que permitirá a los intendentes que controlen los precios. En las últimas horas apareció públicamente para oponerse en el nuevo impuesto extraordinario, por única vez, a partir de un proyecto de ley presentado por legisladores del Frente de Todos y que esta en pleno debate legislativo.

En declaraciones a radio La Red, Coto se manifestó en contra del impuesto extraordinario a los más ricos. “Yo tengo muchas propiedades en la Argentina, muy bien ubicadas y me lo toman como un activo, que ahora ya no es un activo. Si van a cobrar impuesto sobre eso, estamos embromados”, aseguró y agregó amenazante: “Si vamos a correr al aparato productivo, esto se acabó. Se caza en el zoológico, no hay más…”.

En esta Argentina cambiante y veloz, pocos recuerdan que Alfredo Coto fue el argentino que más blanqueó con la ley de Macri en el 2017. El periodista Horacio Verbitsky publicó en aquellos días la lista completa de los que blanquearon plata que no tenían declarada en el país. La lista estaba liderada por Alfredo Coto con $7.000 millones de pesos, luego Marcela Rocca, prima de Paolo (Grupo Techint) 6.900 millones de pesos, Javier Madanes Quintanilla (Aluar-FATE) 867 millones de pesos, Marcelo Mindlin (Testaferro de Macri) 770 millones de pesos, Daniel Agustín Novegil (Ternium) 557 millones de pesos, Miguel Madanes (Aluar-FATE) 412 millones de pesos y María Bulgheroni de Luque, hermana de Alejandro (Grupo Bridas) 185 millones de pesos y continuan los lavadores.

Coto se opone a que los intendentes controlen los precios, que en muchos casos están desbocados. “Ahora le dieron el poder de policía a los intendentes. Le doy un consejo de alguien que conoce esta economía cambiante durante los últimos 50 años. Hay intendentes que van a ser justos y hay algunos otros que son un peligro con semejante poder”, afirmó.

El empresario, que funciona como si fuera un “patrón de estancia”, no acepta que un intendente lo cuestione, que le clausure un supermercado o que tenga que pagar un impuesto extraordinario, cuando en el 2017 fue el principal blanqueador, que en la practica se reduce a plata negra que no pago impuestos.

Miércoles, 8 de abril de 2020