Estimaciones de la primera campaña antiaftosa del año indican que se inmunizaron 5.124.563 bovinos contra los 5.615.795 animales de la última vacunación, admiten que la política nacional y la sequía son las causantes de las mermas.
Cifras preliminares de la Fundación Correntina para la Sanidad Animal (FUCOSA) indican que la vacunación para prevenir la fiebre de aftosa, que finalizó el 24 de mayo, arrojó un total 491 mil cabezas menos en toda la provincia comparada con los obtenidos a finales del año pasado.
“Más allá de estos datos, lo preocupante es que detectamos menor cantidad de terneros en comparación con la última vacunación, siendo que la cría es uno de los pilares de la producción local”, explicó Jorge Estigarribia, presidente de la FUCOSA.
Según estimó, habría 160 mil terneros menos con respecto a la segunda campaña 2008, lo cual indica que “se están deshaciendo de los animales porque el negocio deja de ser rentable”.
Sin embargo, Estigarribia pintó un panorama desolador para el futuro de la ganadería ya que si la situación no se revierte será difícil reponer la cantidad de cabezas perdidas tanto por la sequía como por las políticas restrictivas que aplica el Gobierno nacional.
“Necesitamos un cambio en las estrategias que Nación aplica para el sector porque esta actividad es a largo plazo y requiere rentabilidad; es por eso que las acciones que proponemos pasarían por subir los precios que se pagan a los productores y se liberen las exportaciones”, detalló a radio La Red.
El titular del ente sanitario correntino no descartó la posibilidad de “importar carne” si la producción continúa en descenso y comentó que en la provincia cada vez se requieren más rollos de pasto para alimentar a los animales en la entrada al invierno, lo cual podría agravarse aún más.
Viernes, 5 de junio de 2009