Domingo, 22 de Septiembre de 2024
  
22/09/2024 22:31:39
Política Opinión
“La política es para políticos”
Compartir en Facebook    Compartir este artículo en Twitter    Compartir este artículo en WhatsApp    Imprimir esta nota
Jueves, 16 de diciembre de 2021

Santo Tomé (16-12-21): ¿Es necesario y útil habiendo perdido las elecciones, analizar las causas de la derrota, cuando ya no hay segunda vuelta ni dos años por delante para rectificar el rumbo? No es útil, sí necesario, hacer catarsis y en ella volver a encontrar el norte que nunca debió ni debe volver a perder un gobierno peronista.
Por Mario "Rito" Hernández - Militante Justicialista
Digital Santo Tomé


El embrión de esta derrota se comenzó a gestar el mismo día en que “se enemistaron” (2017) el entonces intendente electo, Garay, y el saliente, Giraud. Todo lo que nació de allí fueron frutos de un árbol envenenado, una catarata de errores, uno tras otro, trastocando la razón y confundiendo quién era el adversario a vencer; provocando además una traumática situación en la comunidad y, fundamentalmente, en una militancia que se había abrazado y festejado el triunfo de aquel año.

Tarde, muy tarde, acorralados por la muy buena performance del gobierno provincial en las PASO y la posterior elección general a gobernador, sumada a la presión de militantes y dirigentes provinciales, se logró un acuerdo, no unidad, algo absolutamente insuficiente.

Quién perdió la elección, el ex intendente Garay, hijo de un carpintero peronista de clase media-baja, que, gracias a su esfuerzo y constancia, y a la educación pública se graduó como escribano.

Lo raro de entender es que con esa sólida plataforma cuando tuvo que diseñar su estrategia de gobierno y campaña de reelección, eligió otro camino, diametralmente opuesto al que había transitado.

Siendo joven y sin siquiera matricularse como escribano, se enganchó en una carrera política al lado de dos grosos: Farizano y Giraud, quienes siempre tuvieron claro qué fue, qué es y qué debe ser el peronismo, a qué sectores representa, arropa y protege; sin perder de vista la necesaria transversalidad de las capas sociales.

Garay, equivocadamente, eligió otro camino más fácil, más ligth y menos trabajado políticamente hablando. Apostó a gobernar sin construir y lo hizo desde un club de amigos sin darse cuenta que en esa miope y tubular visión destruía veinte años de entramado social peronista, transversal y abarcativo en el que vastos sectores de la sociedad se sentían contenidos, escuchados, valorados y queridos.

Las características personales juegan fuerte en política, y allí radicó el Talón de Aquiles del proyecto “Primero Santo Tomé”. Garay no pudo, no supo o no quiso empatizar. No se hizo querer por la numerosa familia municipal (compuesta por 820 empleados), que aportó un importante porcentaje de votos no positivos.

Esa falta de capacidad de conducción y liderazgo también se notó en su escaso o nulo contacto con vecinos y vecinas de los barrios periféricos. No entendió o no aprendió que el peronismo no es un espacio político para ser conducido por tibios, pitucos y burócratas. Nunca entendió que el peronismo es lucha y calle, plazas llenas, patas en la fuente, alpargatas embarradas y zapatos empolvados de las calles de tierra de las barriadas periurbanas.

Esos vecinos son los nuestros. Sobre esa base se construye. Los otros son votos prestados, aunque necesarios para ganar una elección.

Pero para ser justo y objetivo, hubo también otro factor muy importante en la derrota: la alta imagen positiva del gobernador Valdés y la millonaria y obscena cantidad de dinero volcada en la campaña, que es cierto, incidió y torció la voluntad popular. La bolsita, la pulpa y la costeleta. Y los $1.000 en efectivo con la boleta…

Pero la misma estrategia llevaron adelante contra Tincho, contra el Tata Sananez y contra el Tape Caram, quienes retuvieron sus municipios ante brutal embestida.

Otro de los errores y quizá el más determinante, por ser el que le daría volumen político e intensidad de campaña a quienes terminaron ganando la elección, fue que el escribano Garay se opuso a incorporar a la mesa de acuerdo al hoy vice intendente alegando que “era el pasado” cuando la realidad demostró que Farizano es pasado, presente y futuro.

Compramos la frutilla del postre. Resultó ser el merengue y nosotros nos quedamos sin la torta.

La política es para políticos…


Jueves, 16 de diciembre de 2021

Copyright ©2008
Surcorrentino.com.ar
Todos los derechos reservados

DESARROLADO POR:
www.chamigonet.com.ar