Corrientes (26-3-22): La polémica por la decisión del intendente libreño Martín Ascúa de dejar sin efecto “la obligatoriedad del uso del barbijo” pasó a formar parte de la agenda del gobierno provincial para atacar al alcalde peronista que les hizo morder el polvo en la última elección. El ataque gubernamental evidentemente es por una cuestión política bastante alejada de lo sanitario, es que la medida por el uso del barbijo ya venía siendo estudiada por el gobierno provincial que pretendía anunciarla con la pompa acostumbrada, pero se encontraron con que Ascúa lo determinó antes en uso de las atribuciones de la autonomía municipal, el hecho generó el malestar del gobernador Valdés muy poco afecto a aceptar que otro tome decisiones sin consultarlo quien ordenó a las autoridades sanitarias emitan un comunicado solicitando que Ascúa retrotraiga la medida hasta tanto sea autorizada por la provincia aduciendo que la misma fue inconsulta y no apegada a criterio sanitario alguno, lo que solo generó que el intendente libreño ratificara la Resolución generando aún mas malestar en Valdés.
Foto: Intendente Ascúa, Director Hospital San José Ferreyra Dame y gobernador Valdés
Es para recordar que desde el comienzo de la pandemia la relación del municipio con las autoridades sanitarias provinciales y del Hospital San José fueron prácticamente nulas al punto tal que desde el Hospital en manos del radical, o vaya uno a saber que es, Jorge Ferreyra Dame fueron en contra de todas las medidas determinadas por la comuna e inclusive negándose a recibir la ayuda ofrecida por el Intendente Ascúa de poner a todo el sistema sanitario municipal a disposición del Hospital para efectuar la vacunación, evitando las largas y tediosas colas, por el solo hecho de querer que no se confunda con que la inmunización era efectuada por el municipio. La relación siempre fue tirante por la negativa provincial en no querer hacer participar a la comuna en las decisiones que se tomaran y esto es lo que se refleja en esta embestida provincial contra Ascúa.
Está también latente la cuestión eminentemente política en donde todavía el gobierno provincial y básicamente el gobernador Valdés y el senador Vischi no logran digerir que Ascúa le haya ganado la elección y ser reelegido intendente siendo que en Paso de los Libres es la segunda ciudad, luego de capital, en donde el gobierno provincial invirtió más dinero para ganar la elección y resultó un estruendoso fracaso por razones que no vienen al caso analizar en este momento pero que tienen que ver simplemente con el capricho del senador Vischi de querer imponer un candidato desconocido por propios y extraños. Por esta razón el embate furioso del mandamás correntino que últimamente evidencia una soberbia inusual no admitiendo que alguien pueda tener decisión propia o que desoiga sus órdenes.
La decisión tomada por Ascúa de suspender la “obligatoriedad del uso del barbijo” que fuera tildada de irresponsable por Valdés, y que dejaba a criterio de las dependencias provinciales, municipales o particulares exigir el uso del barbijo o no, no implica que si fuera necesario en el futuro se revea la misma.
Valdés manifestó en un acto en el día de ayer que "siempre hay personas a las que no les importa la salud pública, nosotros estamos interesados en seguir cuidándonos" y "cuando sea el tiempo nosotros vamos a decir cuál es esa posibilidad, me parece que hay responsabilidad del Intendente", en esta frase está a las claras que el propio Valdés estaba estudiando la posibilidad y que quieren ser los únicos que tomen la decisión.
En los medios afines al gobierno, la gran mayoría abonados a la pauta oficial, manifestaban que el intendente Ascúa “desoyó” las recomendaciones del Ministerio de Salud, cuando en realidad lo que hizo la nota del Ministerio al expresar que la medida fue tomada de “manera autoritaria y sin consulta ni consenso de parte de autoridad sanitaria competente” fue desnudar la nula relación entre comuna y provincia en lo que hace a la salud, ya que en primer lugar desmerece a las autoridades sanitarias comunales al tratarlas de incompetentes, por otro lado al decir que se hizo en forma inconsulta cabe destacar que las autoridades sanitarias provinciales en esta localidad “NUNCA” consultaron, ni siquiera por compromiso, con las autoridades comunales, siempre Ferreyra Dame, director del Hospital, se manejó de manera inconsulta y autoritaria, y por último cabe resaltar que la comuna nunca fue consultada por la disposición del gobierno provincial que atañe a nuestra ciudad.
Entre los argumentos que exhibe Ascúa para tomar esta medida está el hecho claro y contundente en que en la provincia se realizan espectáculos masivos de decenas de miles de personas como la Fiesta del Chamamé o los carnavales en donde no se exigió ni controló el uso del barbijo, entonces mal puede venir a exigir el uso obligatorio en donde hayan más de 10 personas, esta cuestión desnuda en forma contundente que todas las críticas tiene un trasfondo político evidente y que el “CRITERIO EPIDEMIOLÓGICO” que declaman es evidentemente selectivo, se quiere exigir en Libres y no en la capital en los eventos organizados por el gobierno.
La medida seguirá vigente hasta tanto la comuna considere necesario cambiarla, modificarla o volver atrás, siempre con un criterio de razonabilidad y responsabilidad y no de prepotencia.
Sábado, 26 de marzo de 2022