El Gobierno dio marcha atrás y no adelantará la hora en el país. Así lo confirmó esta mañana el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, quien explicó que aplicar esta medida para ahorrar energía sería "inconducente" porque todas las represas están "al 90 por ciento" de su capacidad de generación.
"La señora Presidenta (Cristina Fernández) ha resuelto por el momento no resolver ningún tipo de corrimiento" del horario oficial, señaló el funcionario en diálogo con radio 10.
En este sentido, De Vido remarcó que "la Argentina tiene una ley que faculta a la Presidenta ante los cambios de temporada a cambiar la hora, en función un uso más racional de la energía ", medida que " no se necesitaría " porque "todas las represas están al 90 por ciento" de su capacidad de generación energética y "hay 2020 megavatios más en el sistema que en 2007".
Asimismo, De Vido remarcó que en los últimos dos años "la demanda (de energegía) sólo creció un 2 por ciento".
De esta manera, los relojes de todo el país quedarán tal y como estaban. La medida había tenido el rechazo de la mayoría de las provincias del país: 16 ya habían anunciado que no se sumarían al cambio, mientras que otras seis –entre ellas la de Buenos Aires– y la Capital todavía no habían resueltó qué hacer. La única jurisdicción que había expresado su acuerdo con el adelantamiento de la hora era Misiones.
El cambio horario también era resistido por otros sectores. Gastronómicos, hoteleros y comerciantes reunidos en la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y en la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica (FEHGRA), se habían quedajo porque con el adelantemiento de horario anochece más tarde y los turistas retrasan las recorridas por negocios y las salidas a cenar.
Viernes, 16 de octubre de 2009