Un parche promete revolucionar la vida sexual de las mujeres, disparando sus niveles de deseo hacia las nubes. La droga, Intrinsa, trabaja fomentando y exacerbando los pensamientos excitantes en las mujeres.
Intrinsa, el amor en un parche
Diez años después de que el Viagra revolucionara las vidas amorosas de los hombres de edad media, se espera que la aparición de este nuevo producto haga lo mismo para las mujeres.
En el mes de julio del año pasado, la agencia europea del medicamento dio luz verde a este producto con receta médica en casos de menopausia quirúrgica.
Pero su aparición, a fines de marzo de 2007, en tierras británicas ha dado pie a comparaciones inverosímiles con la pastilla azul que hace una década estimuló la vida sexual de la población masculina de mediana edad:
«Un afrodisíaco femenino», «algo para el fin de semana», «el amor es un parche», se han aventurado a titular los rotativos de las islas.
Parches de testosterona, el Viagra femenino
Cuando se coloca el parche transdermal sobre el estómago o las nalgas, éste comienza a soltar la hormona testosterona dentro del flujo sanguíneo a través de la piel.
Las mujeres que participaron en los estudios previos señalaron querer tener sexo con más frecuencia, y dejaron en claro que sus pensamientos “obscenos” se habían incrementado notoriamente.
Concretamente, los estudios que avalan el medicamento aseguran que el parche incrementa hasta un 74% los niveles de deseo y satisfacción sexual.
En el Reino Unido, alrededor de un millón de mujeres padecen menopausia prematura como consecuencia de una histerectomía, de las cuales, un tercio sufre la angustia derivada de la pérdida de deseo sexual, según los datos oficiales.
Intrinsa es la primera de 20 drogas sexuales femeninas que actualmente están siendo desarrolladas. El efecto de la droga no es inmediato, y los estudios indican que la mujer tarda unas cuatro semanas en alcanzar el nivel correcto de testosterona.
Aunque sólo podrá conseguirse mediante prescripción y está diseñada para personas con problemas sexuales, los doctores creen que la droga será usada con mujeres jóvenes deseosas de sazonar sus vidas sexuales.
Se trata de la primera droga capaz de tener un efecto en la libido de la mujer. A diferencia del Viagra, que sólo trabaja a nivel del cuerpo, el Intrinsa también tiene efectos sobre la parte mental de la mujer.
¿Y los problemas emocionales?
Hay algunas mujeres, que dicen que ya no se sienten interesadas en el sexo, cuyos estudios de laboratorio posteriores revelan que sus niveles de testosterona son extremadamente bajos. Para ellas, es posible que este parche sea la reconstrucción de sus vidas sexuales.
Sin embargo, la medicación no puede resolver los problemas emocionales, que muchas veces son la verdadera causa del bajo o nulo deseo sexual. Si no estás interesada en el sexo porque tu marido es una maldita bestia, entonces el Intrinsa no podrá cambiarlo.
Los expertos advierten que la inapetencia sexual femenina posee «complejas razones» y la solución de su enigma radica en la fórmula hormonas + cabeza + corazón.
Su prescripción, por tanto, debe ir acompañada de un análisis psicológico, cuestiones sobre la relación de pareja y el historial sexual de la paciente.
Existe una variedad de motivos para la inactividad sexual, como razones psicológicas o el ambiente de la persona, por ejemplo, si hay niños alrededor. Los médicos seguirán indagando en todas esas razones, sin atenerse a un sólo tratamiento médico.
Lunes, 16 de noviembre de 2009