El capitán Verón se bancó el festejo rival y analizó la derrota ante el Barsa. "El primer tiempo fue bueno. En el segundo era obvio que nos iban a meter adentro del arco", dijo la Brujita.

En la zona mixta del estadio, después de comerse un golpe duro, Juan Sebastián Verón dio la cara como siempre. El símbolo de Estudiantes se la bancó como un gentleman en pleno festejo catalán, saludó con respeto a Joseph Blatter y recibió el mimo de Julio Grondona. Hasta fue a buscarlo el francés Thierry Henry para consolarlo...

Minutos más tarde, ante la prensa argentina, hizo un balance de la actuación Pincha en el Mundial de Clubes: "No completamos el sueño. No pudimos cerrarlo". Enseguida le comentaron que había hinchas en el centro como si hubieran salido campeones. "Si la gente se siente orgullosa es porque el equipo entregó todo. Les agradecemos el aguante", dijo.

Con la mente en La Plata, pero todavía con las pulsaciones a full, la Brujita fue claro en el resumen de una final que tuvo a su equipo arriba hasta los 88 minutos: "El primer tiempo fue bueno. En el segundo era obvio que ellos nos iban a meter adentro del arco. Pero no fue tan agobiante... Era de esperar porque tienen muchas variantes. Eso se nota".

¿Y el futuro del Pincha? El capitán frenó la pelota y miró para adelante. "Es difícil hablar ahora. Tenemos la Libertadores y el Clausura. Los objetivos están. Hay que seguir con esta mentalidad", fue su cierre antes de volver al vestuario para hablar con sus compañeros. Siempre con la frente alta.


Sábado, 19 de diciembre de 2009