La aprobación de la reforma de salud del presidente norteamericano Barack Obama en el Senado estadounidense, perevista para este 24 de diciembre, quedó hoy más cerca con la aprobación de una medida para limitar temporalmente el debate.
Los demócratas lograron sumar esta madrugada para esta votación clave los 60 apoyos necesarios para evitar las maniobras dilatorias de procedimiento de los republicanos en el debate en el pleno del Senado.
Los representantes republicanos votaron en contra, tal como se esperaba, en esta fase final del duelo por una de las iniciativas políticas más importantes de Obama a nivel político interno.
La votación sobre la reforma de salud, para la que los demócratas deben volver a reunir los 60 votos, está prevista para las 19:00 (hora local) de Nochebuena.
Los demócratas lograron el viernes, tras arduas negociaciones, sumar el voto número 60 cuando convencieron a Ben Nelson. El senador por Nebraska no había confirmado hasta ahora su voto favorable al exigir una regulación más estricta de la financiación de abortos.
El acuerdo con Nelson fue alcanzado en la noche del viernes cuando el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, satisfizo las demandas de su colega de que los fondos federales no sean utilizados para financiar el aborto, así como de que Nebraska reciba más ayuda para aumentar la cobertura de los que no están asegurados.
El senador advirtió, sin embargo, que retirará su apoyo si el proyecto de ley se modifica cuando la Cámara de Representantes y el Senado se reúnan para decidir una versión final.
El proyecto de ley de 871.000 millones de dólares del Senado tiene como objetivo reducir los altos costos médicos y ofrecer cobertura a unas 31 millones de personas de las 46,3 millones que según la Oficina de Censos no la tienen.
La Cámara de Representantes aprobó una versión de un billón de dólares que logró 220 votos a favor y 215 en contra, y fue rechazada por 39 demócratas, e incluye una enmienda que restringe fuertemente la financiación federal al aborto, salvo en casos excepcionales.
Los republicanos se oponen a la ley con el argumento de que aumentará el déficit federal. El senador republicano Mitch McConnell llamó al proyecto de ley “un desastre legislativo de proporciones históricas”.
Lunes, 21 de diciembre de 2009