Queridos Gaspar, Melchor y Baltasar en esta humilde notita les voy a hacer un pedido que no es solo para mi, es para todos los libreños de bien, esos que se levantan todos los días a trabajar y cuando vuelven a las casas quieren refrescarse y descansar.
Quiero que nos traigan luz, agua y también gas, mamá está cocinando en la parrilla, ya se que no es fácil, le pedí lo mismo al niño Jesús pero la luz se cortó igual y el agua también, además tiene un olor muy feo, habrá sido que tenía muchos pedidos y no pudo cumplirlos a todos. El mejor regalo para todos nosotros será poder vivir tranquilos, sin tener que estar pensando cuando se va a cortar la luz o si vamos a tener agua para bañarnos. Desde ya les agradezco, voy a poner mis zapatillas esperando que puedan cumplir con mi pedido, también les voy a poner pastito para los camellos y si llega agua al tranque de casa a la noche también un poco de agua.
Con todo cariño, un niño libreño.
Martes, 5 de enero de 2010