La interconexión vial entre Goya (Corrientes) y Reconquista (Santa Fe), nace de la necesidad de conectar las redes viales de ambas provincias. La obra implicará una inversión de 800 millones de dólares, comenzará en la Ruta 11, a ocho kilómetros al Norte de la ciudad de Avellaneda, en la Provincia de Santa Fe, y finalizará en la Ruta Provincial 27, a cinco kilómetros al Sur de la localidad de Lavalle, en Corrientes. Tendrá una extensión de 41 kilómetros y contará con 16 puentes en planicie y un puente atirantado sobre el río Paraná que será el más grande del país.
En Agosto del 2005 el Gobierno Nacional y ambos gobiernos provinciales firmaron un acuerdo con el objeto de elaborar el proyecto ejecutivo de una conexión física, para lo cual definieron una Unidad Ejecutora del Proyecto con integrantes de las tres jurisdicciones.
Previamente, en 2003, el Consejo Federal de Inversiones había realizado, a través de terceros, un estudio de alternativas de cruce y un anteproyecto preliminar de la obra. El análisis de las alternativas abarcó, en esa oportunidad, aspectos técnicos, económicos y ambientales, evaluándose 29 trazas para la selección de la localización del cruce.
Este estudio se tomó como antecedente para la elaboración de los términos de referencia y la licitación del proyecto ejecutivo, realizada en 2006 por la Dirección Nacional de Vialidad (DNV), resultando adjudicatario un consorcio de cinco consultoras argentinas.
El proyecto ejecutivo está listo y lo único que falta es que los gobernadores de Corrientes y Santa Fe firmen el proyecto y soliciten la audiencia ante el Ministerio de Planificación Federal a fin de explicar la megaobra y comenzar a buscar las fuentes de financiamiento.
Actualmente, la Mesopotamia tiene siete conexiones viales con los países vecinos y solamente cuatro con el resto de la Argentina. La interconexión vial Goya – Reconquista, junto a las obras existentes en Corrientes – Resistencia, Santa Fe – Paraná, Rosario – Victoria y Zárate – Brazo Largo, mejorará la integración de la Mesopotamia argentina al resto del país.
Esta conexión, además, forma parte de importantes planes regionales, nacionales e internacionales de integración de transporte multimodal como son el Eje Capricornio y el Eje Mercosur Chile del IIRSA (Sistema de Integración de la Infraestructura Regional Sudamericana) y el Plan Estratégico Territorial de inversión en obra pública para la Argentina del Bicentenario.
El proyecto
La obra, cuyo trazado comenzará en la Ruta 11, a ocho kilómetros al Norte de la ciudad de Avellaneda, en la Provincia de Santa Fe, y finalizará en la Ruta Provincial 27, a cinco kilómetros al Sur de la localidad de Lavalle, en Corrientes, tendrá una extensión de 41 kilómetros.
El tramo de 36 kilómetros que recorre la zona de islas y riachos que comprenden la planicie de inundación del Paraná y que se encuentra sobre el lado santafecino, contará con 16 puentes que, en conjunto, sumarán unos 4.200 metros y más de 30 kilómetros sobre un terraplén refulado.
El cruce sobre el cauce principal del río Paraná, está conformado por un puente principal atirantado con una luz central de 390 metros sobre el canal de navegación, y sus respectivos viaductos de acceso. La longitud total de estructuras de este cruce, es de 3,9 kilómetros.
Dos, por sentido de circulación, será la cantidad de carriles, mientras que la longitud de puentes en planicie será de 4.235 metros y la longitud del cruce principal de 3.875 metros. El plazo de construcción se estimó en cuatro años.
Desarrollo del proyecto ejecutivo
En el proyecto ejecutivo de la obra se invirtieron dos años de trabajo de más de 200 profesionales y técnicos abordando 24 áreas que cubrieron las distintas especialidades.
Dada la complejidad del área de implantación del proyecto, fue necesario contar con información de base muy amplia que permitiera utilizar modelos matemáticos para analizar el comportamiento hidráulico del río Paraná en relación a las obras proyectadas.
El área relevada abarcó 320.000 hectáreas y se realizó mediante aerofotogrametría. También se llevó a cabo un relevamiento a lo largo de 150 kilómetros, con equipos terrestres por terrenos de gran dificultad, anegados y cubiertos de vegetación, para obtener, con mayor precisión, la información de la zona de implantación de la futura obra. Además, se efectuaron 200 perfiles batimétricos del río Paraná y afluentes.
La investigación del suelo totalizó aproximadamente 8.000 metros de perforaciones y el ensayo de 9.000 muestras de suelos e incluyó sondeos de más de 80 metros de profundidad en el fondo del río Paraná para conocer la composición del subsuelo, determinar la resistencia de los estratos profundos y definir las fundaciones de los puentes.
Asimismo, se analizó el comportamiento histórico del río con respecto a las crecidas y, mediante modelos matemáticos, se determinó la longitud y ubicación de cada puente para una crecida de recurrencia milenaria.
Defensa de la costa correntina
A lo largo de varias décadas se ha observado un fenómeno de erosión en gran escala de la costa correntina a la altura de la ciudad de Lavalle. Esto originó la pérdida de varias manzanas urbanas y amenaza la integridad de dicha ciudad. La solución proyectada no sólo permite estabilizar la erosión sino que además genera un espacio de integración entre la ciudad y su río.
La Ruta 11 atraviesa actualmente las ciudades de Reconquista y Avellaneda, en la Provincia de Santa Fe, lo cual no solamente provoca inconvenientes en el funcionamiento de dichas ciudades y demoras y sobrecostos de transporte al tráfico de la ruta nacional, sino que además es un obstáculo para la interconexión Goya – Reconquista en su función de estructurar una red regional e internacional.
Se proyectó una variante tipo autopista que esquiva ambas ciudades por el Este, brindando accesos a los centros urbanos, a los parques industriales y al puerto de Reconquista y conectando la Ruta 11 hacia el Norte y hacia el Sur, la Ruta Provincial 40 y la interconexión Reconquista – Goya.
Sábado, 30 de enero de 2010