El bufón correntino complica cada vez mas la relación de la Provincia con la Nación, la elección de Ricardo Colombi de sus representantes para la legislatura nacional fue un verdadero fiasco para los correntinos, tanto Artaza como Aspiazú dejaron de lado los intereses provinciales para trabajar en proyectos netamente personales. Artaza pretende desalojar a Bellia en la intervención partidaria en Corrientes para erigirse en el nuevo interventor y usar ello como trampolín para lograr su verdadera intención, gobernar la provincia.
A esta altura del campeonato no son pocos los que creen que Ricardo Colombi le terminó regalando la importante banca de senador nacional a Eugenio Nito Artaza. ¿Una farsa o el mejor de sus chistes?, el capocómico, que en la última temporada teatral en Mar del Plata, ya con envestidura de legislador de la república, anduvo flojo de recaudación y las demás obras prácticamente lo pasaron por arriba, tendría su juego propio: ser designado interventor partidario en Corrientes en lugar de José Luis Bellía.
Artaza llegó a la capital correntina a mediados de 2009 vestido de hombre honesto y probo, gritando a los cuatro vientos su apoyo incondicional a su amigo Ricardo, quien a la postre se convertiría por segunda vez en gobernador de la provincia. Afirmó que trabajaría codo a codo en los proyectos que más le iban a favorecer a Corrientes. Pero de a poco el humorista se iría sacando su traje de cordero ingenuo para dar paso al de un lobo angurriento y enceguecido por las marquesinas de la política porteña. Ahora subido al carro de la estrategia del Comité Nacional de la UCR de rechazar el fondo del bicentenario, quiere convertirse en el delegado normalizador del radicalismo correntino.
Martes, 9 de marzo de 2010