Las caricias en la espalda, cabeza, brazos, pecho, pompis, en fin en cada parte del cuerpo, puede convertirse en una aventura única, emocionante y sumamente placentera con tu pareja.
Masaje erótico
Las caricias en la espalda, cabeza, brazos, pecho, pompis, en fin en cada parte del cuerpo, puede convertirse en una aventura única, emocionante y sumamente placentera con tu pareja.
El masaje erótico es ante todo, un intercambio de papeles y, por tanto, sensaciones. Para que éste sea todo un éxito, debes cuidar varios aspectos importantes o reglas de oro que a continuación describimos.
• Un menú ligero. Antes del masaje puedes probar un menú light y ultra afrodisíaco que incluya ostras, fresas y champagne.
• Clima de la habitación. El ambiente ideal debe ser cálido para poder disfrutar plenamente del masaje, 25 grados es lo ideal.
• Crea una atmósfera Zen: luces tenues, música suave y relajante de fondo crearán el ambiente adecuado. Desconecta el teléfono para evitar interrupciones. Si lo deseas puedes vaporizar en el ambiente aceites esenciales para un aroma agradable.
• Un lugar cómodo: coloca cojines suaves sobre la cama, sofá o el suelo y utiliza mantas calientitas y suaves, agradables para la piel.
• El aceite de masaje. Invierte en uno que sea algo fluido y graso para que las manos se deslicen bien por la piel. Prefiere aceite vegetal biológico del olor que más te guste.
• Joyas fuera y uñas cortas: Para evitar arañar a tu pareja, no olvides cortarte las uñas y quitarte las joyas.
• Atiende a sus sensaciones, ver variando la presión según sus reacciones. Lo podrás sentir en su respiración.
• Cambia la técnica, prueba rozando, "amasando", pellizcando, masajeando, o presionando. Sólo ten cuidado con cicatrices y várices.
• Deja volar la imaginación: Alterna tus caricias con besos y mimos, ¡tú sabes lo que más le gusta a tu pareja!, por tanto no tienes que seguir las reglas aquí propuestas al pie de la letra.
• Disfrútenlo al máximo.
Viernes, 2 de abril de 2010