Santo Tomé (5-5-10): En los últimos días cobró notoriedad y trascendió de fuentes calificadas que los aprietes y las persecuciones al personal de distintas áreas del Hospital San Juan Bautista, se ha convertido en una práctica habitual de parte de los actuales directivos. Las intimidaciones de la que muchos por lo bajo hablan, pero que públicamente no lo hacen por temor a fuertes represalias, se ha vuelto una práctica habitual, dándose mayormente con el personal que es contratado por la denominada caja chica del mencionado centro asistencial.

Todo indica que la intención de máxima sería que este personal termine renunciando a sus puestos de trabajo, para así avanzar en un recambio que básicamente incluiría a gente que trabajó en la última campaña electoral para Encuentro por Corrientes. Los aprietes y persecuciones se están dando mayormente con el personal que fuera contratado en la época de Adolfo Schneider como ministro de Salud. Ayer lunes, fue removida de su cargo, la encargada del área de informes y consultorios externos, quien a su vez cumplía con la realización de la documentación de los bebés recién nacidos. No se descarta que hayan existido fuertes presiones para lograr desplazarla. Una historia que se sabe como comienza, pero no se sabe cómo terminará.

Los movimientos de personal que se produjeron en los últimos días, incluyeron a quienes fueron contratados en la anterior gestión de gobierno, pero con varios años de antigüedad en la función. Concretamente las acciones intimidatorias y persecutorias, se vienen dando con prácticas tales como traslados sin explicación alguna a otros sectores del hospital, intimidación psicológica y hasta violencia verbal en algunos casos.

Las razones se darían por que gran parte del personal no se identifica políticamente con quienes conducen actualmente el hospital. En este contexto, el atraso salarial para con el personal contratado de la caja chica juega otro condimento fuerte en todo este conflicto y es así que el propio director Néstor Buján en las escasas oportunidades que habla con los empleados, deja entrever que el pago de los sueldos y las horas extras adeudadas, dependerá mayormente de lo que se llegue a recaudar diariamente del sistema de arancelamiento, por lo que todas las directivas apuntan a mejorar la recaudación en esta área.

Por otra parte en las últimas horas de este lunes, se confirmó el “traslado” de una empleada administrativa a una salita de primeros auxilios o bien podría optar por cumplir funciones en el área quirúrgica. Este hecho de alguna manera desencadenó una serie de conjeturas respecto de las verdaderas razones de la medida adoptada, por cuanto la misma ingresó a trabajar en la época en que el hospital era conducido por los doctores Alfredo Alegre y Carlos Triadani y luego contratada en la gestión de Tupy Schneider como ministro de salud. Así es que no se descarta tampoco que todo sea parte de una estrategia tendiente para desplazar a la empleada del sector donde hasta ayer lunes se desempeñaba como encargada de informes y consultorios externos, lugar a donde ingresó a trabajar en el año 2007 luego de realizar una pasantía laboral tras egresar del Instituto Terciario Irupé y no precisamente por ningún tipo acomodo político.

En verdad, esta empleada venía siendo objeto -desde la asunción misma de Néstor Buján como director del hospital- de fuertes represalias y persecución de todo tipo para que abandone su puesto de trabajo. Los motivos serían al menos dos.

Las razones-esgrimen las fuentes- serían dos y una de ellas apunta a que su función en el área donde se confecciona las documentaciones burocráticas de los bebés recién nacidos, no terminaba de convencer a quienes manejan el área legal del hospital, sector este encabezado de manera muy sugestiva por el abogado del foro local Joselino Fernández Blanco y a quienes sindican como el cerebro de haber montado un verdadero estado policíaco dentro del nosocomio para con quienes no comulgan con sus nuevos “lineamientos”. Un claro ejemplo de ello, es que en todas las áreas se montó una especie de “doble comando”, generando así un profundo malestar en todo el personal que allí cumple funciones.

A raíz de ello, es de público conocimiento que el sector de donde fue desplazada la empleada en cuestión, es un área donde todas las miradas están puestas por cuestiones que son de público conocimiento tanto a nivel local, provincial y nacional, y su cerrada negativa a “facilitar” y “viabilizar” la realización de los trámites pertinentes, en muchos casos terminaba siendo una molestia para determinados estudios jurídicos de esta ciudad.

En esa línea resultó llamativa y muy evidente las presiones ejercidas para avanzar en un cambio urgente en esa área. En verdad, un caso que podría llegar a tener derivaciones impensadas en el corto y mediano plazo. Pero en verdad también, se está ante la presencia de un entramado por demás complicado.

Otras de las conjeturas, es que el hecho de ser la esposa de un trabajador de un importante medio de comunicación que tienen una filial en esta ciudad, habría sido otro de los factores que apuró el “traslado” en cuestión a manera de represalia, por cuanto el propio Buján estaría sumamente disconforme a partir de la labor periodística que desarrolla el esposo de la empleada administrativa removida de su cargo, ya que permanentemente no disimulaba su malestar cuando no le gustaba la divulgación de determinadas situaciones, de las cuales Buján en la mayoría de las veces se negó a ejercer su derecho a réplica. Uno de esos caso se dió cuando el propio ministro de salud Julián Dindart, dijo publicamente en esta ciudad que el recambio de autoridades en el hospital local, se dieron por cuestiones estrictamente políticas. La divulgación de esta nota, habria provocado mucho malestar en Buján.


En definitiva, toda una contradicción lo que viene ocurriendo en Santo Tomé si se tiene en cuenta que esta es una de las pocas ciudades donde el propio Ricardo Colombi siendo candidato a gobernador, puso de relieve el accionar de los medios de comunicación que siempre le brindaron cobertura a sus presencias de neto corte electoralista, algo que según sus propis palabras, no ocurría en el resto de la provincia. Pero también, repetía una y otra vez que una vez en el poder, las persecuciones, las amenazas y los aprietes se terminarían en toda la geografía provincial. Algo que pareciera ser algunos de sus seguidores en Santo Tomé, no están dispuestos a cumplir.

A todo esto las reacciones mediáticas no se hicieron esperar y Joselino Fernández Blanco salió rápidamente a tratar de desvirtuar lo publicado por este portal, fundamentalmente cuando se habla de la función que cumplía la empleada removida del cargo que anteriormente ocupaba y que era la de realizar todas los trámites burocráticos para avanzar en la documentación de los recién nacidos. Tambiién buscó victimizarse hablando de supuestas amenazas que habría recibido de parte del esposo de la empleada que fué desplazada de su cargo.

En un medio radial, Fernández Blanco dijo que ayer mismo se llevó a cabo una reunión entre el director del hospital Néstor Buján; el director del Registro Civil y el Jefe de la Unidad Regional Quinta de Policía para ver de qué manera se podría instalar una oficina del Registro Provincial de las Personas en el mismísimo Hospital San Juan Bautista. Resulta todo un tanto sugestivo que una vez que tomó estado público este caso, se haya acelerado la decisión de agilizar la documentación de los bebes colocando una oficina en el Hospital.

Finalmente y por si algo faltara para polemizar aún más con la actual conducción del San Juan Bautista, se supo que en los últimos días cobró cuerpo la versión que indicaba que sus actuales directivos, habrían tomado ya la decisión de afectar sus vehículos particulares al servicio del nosocomio, por lo tanto los gastos correrían por cuenta de la denominada caja chica. Una situación de la que algunos médicos, dijeron nunca ocurrió eso en administraciones anteriores.


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Miércoles, 5 de mayo de 2010