La Defensoría del Pueblo de la Nación remitió un informe a la Legislatura de la provincia de Corrientes advirtiendo sobre el impacto ambiental negativo que tendrá la construcción de una represa sobre el arroyo Ayuí Grande, impulsada por las empresas Copra S.A. (Grupo Clarín) y Adecoagro S.A. (Grupo Soros), y apoyada por el Gobernador Ricardo Colombi mediante una Ley que se encuentra cuestionada judicialmente.
Foto: Ricardo Colombi reunido con los empresarios de Clarín y Soros, en la primer reunión pocos días despues de asumir el gobierno para corroborar la intención gubernamental de permitir el represamiento.
El consorcio productivo, integrado además por las firmas Pilagá S.R.L., Tupantuva S.A., Santa Clara y Yuquerí S.A., tiene prevista la creación de un lago artificial de 8000 hectáreas para el riego de unas 18.000 hectáreas de cultivos que se instalarían en esa zona. "Esto implica sepultar bajo el agua kilómetros de costas, bosques nativos, pastizales y pajonales que constituyen el paisaje natural de la zona y tienen continuidad ambiental con los esteros del Iberá", señaló el adjunto de la Defensoría, Anselmo Sella.
El informe, elaborado en febrero pasado, sostiene que pasar de una zona de pasturas y sabanas naturales, con predominio de la ganadería, a una producción arrocera "implica cambios sustantivos en la cultura social de la región, con fuerte impacto en las condiciones de vida de los pobladores locales. (...) Decir esto es hablar de identidad cultural, del conjunto de valores, tradiciones, hábitos, símbolos, creencias y modos de comportamiento que funcionan como elemento cohesionante dentro del grupo social de esa región", fundamentó la Defensoría nacional en el escrito.
Sella señaló que los cambios propuestos implicarán una verdadera transformación en las políticas sociales, laborales, productivas y culturales de toda la región colindante al arroyo Ayuí Grande. Agregó que los principales estudios de impacto se han centrado preferentemente en lo económico pero muy pobremente en lo social. El funcionario, consideró importante que "al momento de aprobar el Plan de Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos se tenga en cuenta la implicancia del impacto acumulado que representan, para la sociedad y los ecosistemas, el conjunto de los desmontes y cambios en el uso de la tierra potencialmente permitidos en la provincia de Corrientes".
El titular de la Fundación Iberá, Enruique Lacour, por su parte, afirmóque "lo que pretenden hacer es muy grave, la apropiación de un bien público por parte de empresas privadas es indisimulable”.
Lunes, 16 de agosto de 2010