"Se habla de un consenso, pero el Gobierno puede acordar con los que apoyan. Muchos no somos escuchados, y vamos a estar en la vereda de enfrente. La herida que hay en el radicalismo desde hace cuatro años, no va a cicatrizar. En lo personal busqué acordar, dialogar, tener representatividad a nivel nacional, pero no fui escuchado", dijo el actual diputado nacional Rudy Fernández, quien agregó: "hay muchos indicios de que muchos radicales irán por afuera el año que viene".
"El que gobierna debe ser el más generoso, y muchas veces eso no pasa", agregó. "Hablo por muchos dirigentes del interior que no responden al oficialismo, pero no tenemos respuesta a lo que les pedimos. Acá hay referentes, legisladores, y con mucha representatividad", dijo Fernández.
"Chocamos contra posturas que son casi inquebrantables", agregó.
"Acá fallamos todos. La intervención llamó muy pronto a internas. Hay localidades en los que hay cuatro líneas internas, con interferencias a nivel provincial. Antes el partido estaba fracturado en dos, ahora tiene muchas fracturas", precisó el legislador.
"Quise actuar como un traumatólogo para atender el enfermo, pero resulta que me encontré con un enfermo que tiene múltiples fracturas craneales. Y acá todos somos culpables", dijo Fernández.
Viernes, 19 de noviembre de 2010